El artista del performance Luis Manuel Otero Alcántara fue liberado el martes con una multa de 200 pesos, luego de pasar dos días en los calabozos de la unidad policial El Vivac, en La Habana.
Otero Alcántara y cuatro artistas más protestaron contra la aprobación del Decreto No. 349/ 2018 que regula la prestación de servicios artísticos y legaliza la imposición de la censura a todos los géneros de la Cultura en el país.
LEA TAMBIÉN: Nuevas normas firmadas por Díaz-Canel institucionalizan aún más la censura en Cuba
El artista y co-creador de la #Bienal00 de La Habana pensaba cubrirse el cuerpo de excremento humano, pero al ser detenido fue su esposa, la curadora de arte Yanelis Núñez quien asumió la acción.
Como han sido cuestionados en las diferentes redes sociales por este acto, Otero explicó sus fundamentos.
“Esto parte del simbolismo básico de cómo nos sentimos ante un poder casi absoluto y el hecho de como artista en Cuba eres una m… El régimen puede imponer leyes que van contra el mismo individuo y no pasa nada”.
Como antecedente inmediato Otero cita el caso del artista Angel Delgado, que en el 4 de mayo de 1990 realizó el performance "La esperanza es lo último que se está perdiendo" donde el artista defecó sobre un ejemplar del diario oficialista Granma. Su acción plástica fue castigada con 6 meses de cárcel, que cumplió en la prisión Combinado del Este.
En esta ocasión la teatrista Iris Ruiz, el poeta Amaury Pacheco, la curadora Yanelis Núñez y el rapero Soandry Del Río llegaron hasta la escalinata del Capitolio Nacional. Todos, excepto Núñez recibieron multas.
Núñez se cubrió de excremento y aseveró ante las cámaras “Aquí la cultura cubana está siendo pisoteada y si Luis Manuel no lo pudo hacer, yo lo voy a hacer, basta ya”.
Alcántara, iniciador de la campaña contra el Decreto No. 349, se siente alarmado porque “dentro de un tiempo todo artista que no tenga estudios académicos o no entre dentro del canon que el sistema decide, va a ser una m… vas a apestar y al final vas a desaparecer”.
Legalizada la censura en Cuba
Si bajo la égida de Fidel Castro la proclama “Dentro de la revolución todo, fuera de la revolución nada” dictó la política cultural del régimen, con el Decreto 349 se alcanza el viso legal necesario para ahogar cualquier iniciativa cultural alternativa.
“No es solo contra los artistas independientes no inscriptos en el Registro del Creador – una especie de catastro para controlar a los creadores-, también les dice a los que pertenecen al sistema: ‘No se hagan los locos que les puedo quitar el carné y a esa hora entran también en este saco’”, sentenció el artista independiente quien presentó su performnace Testamento de Fidel Castro en el Centro George Pompidou de París.
Luis Manuel Otero pone de ejemplo a artistas como Luis Trápaga, quien organiza actividades alternativas en su casa-galería El Círculo, y fue amenazado con retirarle el permiso para comercializar su obra.
El silencio de muchos artistas respecto a la aprobación del decreto-ley estaría entre el miedo y el desconocimiento, asegura Alcántara. “Esa ley a nosotros nos llega porque estamos constantemente arriba de todo lo que sale, de todo tipo de injusticia que comete el sistema”.
“Ahora mismo hay un montón de artistas que ni siquiera se enteran de hasta qué punto los afecta esta ley y muchos dicen ‘Ah, eso es más de lo mismo’”, explica Otero.
Control absoluto
El pensamiento crítico en Cuba, en casi seis décadas de totalitarismo, ha sido vigilado de cerca, bajo control del Partido Comunista, el Ministerio de Cultura y la Seguridad del Estado.
“Ellos lo que quieren es tener control absoluto sobre el pensamiento individual del cubano”, señala Otero.
"¿Quiénes estarían regulados también? Pues los trovadores que amenizan las tardes-noches del malecón habanero. “Eso ahora mismo está penado. Te pueden decomisar tus instrumentos. ¿A cuántos raperos le van a dar el carné ellos? Es imposible quitarles la voz, pero te pueden meter preso”, advierte el artista.
Contra los espacios alternativos
En el Capítulo II, toma como contravención, en el Artículo 2.1, en los incisos b), c), d) y e)lo siguiente:
b) el que realice o permita el pago a un artista o colectivo artístico, sin que dichos servicios hayan sido contratados a la institución cultural a que corresponda la prestación de estos;
c) el que como artista individual o actuando en representación del colectivo a que pertenece, brinde servicios artísticos sin la autorización de la entidad que corresponda;
d) el que sin estar autorizado por la entidad a que pertenece el artista o colectivo artístico actúe en representación de estos; y
e) el que preste servicios artísticos sin estar autorizado para ejercer labores artísticas en un cargo u ocupación artística.
Otero asegura: “En esta nueva ley están atacando los espacios alternativos que estaban saliendo en los últimos dos o tres años. Artistas como (Carlos) Garaicoa o Los Carpinteros saben que tienen que portarse bien”.
Igualmente Alcántara cita “un espacio alternativo como el de Tania Bruguera –el Instituto Internacional de Artivismo Hanna Arendt-, INSTAR, ahora mismo es ilegal, al doscientos por ciento”.
Finalmente, Otero Alcántara defiende su derecho a protestar públicamente sin ser sancionado por las autoridades.
“¿Por qué en Cuba no podemos marchar pacíficamente? Al final ellos mismos están exponiendo ante el mundo que son unos represores, una dictadura, y bien. Nosotros sí vamos a seguir exigiendo desde maneras muy creativas… que quiten la ley, es algo muy puntual. Esa ley es una m… y no nos representa”, concluyó el artista Luis Manuel Otero.
Your browser doesn’t support HTML5