Yindra Elizástigui, madre del prisionero político Luis Robles, se declaró en huelga de hambre frente a la estación de policía de la calle Dragones, en La Habana, donde se encuentra detenido otro de sus hijos, Lester Fernández, según explica la señora, por defenderse del ataque de un policía.
La mujer subió a sus redes sociales un video en el que pide se divulgue esta noticia y donde anuncia que se declara en huelga de hambre. "Estoy aquí afuera de la unidad de Dragones, de donde no pienso retirarme hasta que a mi hijo me lo pongan en libertad".
Según explicó la señora, el pasado 20 de julio el joven se encontraba en una fiesta cuando el policía nombrado Yusdel Losada Cutiño se apareció de las 10 de la mañana en el lugar y dio la orden de que apagaran la música y, pese a que la música fue silenciada, el policía fue directo a donde estaba sentado su hijo y la emprendió a golpes contra éste.
El hermano del preso político “por supuesto respondió a la agresión”, apuntó Yindra, quien concluyó su post exigiendo “respeto para el pueblo”.
Su otro hijo, Luis Robles está reconocido por Amnistía Internacional como preso de conciencia.
El joven de 32 años cumple una condena de cinco años de cárcel por delitos de propaganda enemiga y desobediencia, por manifestarse en solitario con un cartel en diciembre de 2020, en La Habana, pidiendo libertad y el fin de la represión a los cubanos.
De acuerdo con la madre del joven, no es la primera vez que los agentes del orden arremeten contra su hijo Lester, ya que en 2023 fue arrestado y acusado de intento de salida ilegal.
La mujer supone que todo se debe a represalias por el prisionero político Luis Robles, a quien le fuera negado el derecho a libertad condicional el pasado mes de mayo.