El Instituto Patmos alertó este domingo sobre “la alarmante tendencia de la entrada a Estados Unidos de responsables del sistema comunista en Cuba”, que, evadiendo su papel en el aparato represor cubano, logran engañar al servicio de inmigración norteamericano.
“Nos sentimos alarmados ante lo que ya no son ni dos, ni tres, ni cuatro casos, sino que constantemente vemos cómo funcionarios, incluso de alto rango, como es el de este señor, que entró por el aeropuerto de Miami dando un manotazo a Mario Pentón”, indicó Mario Félix Lleonart, director de Patmos.
Se trata del exdirigente del Partido Comunista de Cuba (PCC) en Cienfuegos Manuel Menéndez Castellanos, que arribó el jueves a Estados Unidos gracias al proceso de reunificación familiar.
Lee también Otro ex alto funcionario del régimen cubano llega a MiamiLa declaración de la organización, que tiene entre sus objetivos la defensa y el monitoreo de las libertades religiosas y los derechos humanos, se refiere, además, al programa de refugiados políticos, que no se ha reanudado, y recuerda que “la política de Estados Unidos” siempre ha sido solidaria con los derechos humanos y sus defensores.
“Contrasta con muchos casos que tenemos dentro de Cuba, que son las víctimas del castrismo que no tienen acceso a un programa de refugiados, pues este programa de refugiados se encuentra en stop (detenido) desde hace años”, apuntó el reverendo.
El United States Refugee Admissions Program in Cuba (USRAP) quedó detenido en 2018, cuando la Administración Trump decidió reducir al mínimo el personal en la embajada en Cuba, luego que decenas de diplomáticos reportaran afectaciones a la salud, que se investigan como el Síndrome de La Habana.
“La realidad es que mientras represores cubanos arriban a Estados Unidos con total impunidad, sus víctimas en Cuba permanecen sufriendo como rehenes los horrores del castrismo”, afirma la declaración.
Patmos también lamenta que el programa de Parole Humanitario no haya favorecido directamente a víctimas del acoso del régimen y cita los casos de perseguidos religiosos como el de los pastores guantanameros Ramón Rigal y Adya Expósito, con solicitud de Parole Humanitario desde agosto de 2023.
En 2019, Rigal fue sentenciado a dos años de privación de libertad y su esposa Adya Expósito, a uno y medio, tras retirar de la escuela a sus hijos y enseñarles mediante el homeschooling, la práctica de educar a los hijos en casa, prohibida en la isla, donde el sistema educativo responde a la línea ideológica del Partido Comunista.
La institución que tiene su sede en Washington, DC, describe otros religiosos que han sido objeto de acecho por parte de la Seguridad del Estado cubana como “los pastores Elier Muir Ávila y Minervina Burgos, con Parole Humanitario pedido desde diciembre de 2023.
Agrega el caso del joven Danny Hernández Rodríguez, hijo del pastor Alejandro Hernández Cepero que, por estar enfermo, había solicitado un parole humanitario desde el 18 de diciembre de 2023, pero Danny murió el pasado 14 de agosto sin poder atenderse en Estados Unidos.
El Instituto Patmos cita en su comunicado la carta, con fecha 13 de agosto de 2024, enviada al secretario de Seguridad Nacional Alejandro Mayorkas, por los congresistas de mayor rango en el Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes, solicitando una investigación sobre las irregularidades en el procesamiento del Parole Humanitario, que habían sido advertidas antes.
Antes, el 8 de agosto, congresistas republicanos del sur de la Florida manifestaron preocupación sobre la situación del Programa de Admisión de Refugiados de la Embajada de Estados Unidos en La Habana y solicitaron respuestas a los secretarios de Estado y de Seguridad Nacional, Antony Blinken y Alejandro Mayorkas.
“Este gran contraste entre la llegada a los Estados Unidos, con total impunidad, de los victimarios y que las víctimas sigan dentro de Cuba sin ningún tipo de prioridad y con programas tan importantes como el de refugiados paralizado, o sin prioridad ninguna a través del parole, pues nos hizo hacer esta declaración que bueno esperamos tenga algún tipo de efecto en quienes toman decisiones”, subrayó Lleonart.