Albita Rodríguez confiesa que vive con un dolor permanente porque su música no llega a los cubanos de la isla, dice que se muere de ganas de cantar en Cuba, pero está convecida de no regresar porque no comulga con el sistema político que impera allí.
"Quiero ir cuando haya una Cuba libre y todos los cubanos tengan las mismas oportunidades”, declaró en entrevista concedida a Radio Televisión Martí a raíz de su reciente nominación al Latin Grammy por su disco "Acústica".
La cantante habló de su gran pesar al haber perdido a su público en la isla, donde "la música, ha cambiado mucho".
"No creo que la gente me recuerde en Cuba porque han pasado muchos años desde que salí. Me queda ese dolor en el pecho de que te van olvidando porque han pasado generaciones. Me fui en el año 1990 a Colombia, regresé por una semana y ya después me fui y no regresé más”, dijo en conversación con el realizador Joe Cardona.
"Ahora regresé de una gira de 3 años con un musical muy importante, “Carmen la cubana”, y la mayoría del elenco y los músicos vivían en Cuba y no me conocían, la mayoría eran muchachos muy jóvenes”, comentó la artista.
“Siempre me queda ese dolor, esa taquicardia constante en el pecho de que la gente en Cuba me haya olvidado, porque la razón de ser mía como artista ha sido todos los días de mi vida -desde que empecé en esta carrera a los siete años de edad- llevar la cultura cubana por el mundo. Entonces es muy triste que en Cuba no te conozcan o no te oigan, es bien triste”.
Pero algo que sí le da alegría y la tomó por sorpresa ha sido la nominación de "Acústica" al Latin Grammy en la categoría de mejor álbum de cantautor, porque en esta ocasión ha logrado competir con los grandes de la industria con un disco muy sencillo, que ha producido de manera independiente.
“Vuelvo a la Albita de mis orígenes cuando empecé tocando una guitarra. Es un disco de guitarra, contrabajo y cajón, y algunos elementos de percusión, muy poquitos instrumentos, apostando más que todo a las letras. Son canciones mías que nunca había grabado", explica la cantante.
Con una veintena de nominaciones a los Grammy y los Latin Grammy la cantautora quiere compartir con los cubanos de la isla el éxito de su carrera como exiliada en los Estados Unidos: "Quiero poder decirles todo lo que he hecho en estos años, de defender la cultura cubana y de sumarme con un granito de arena a esa larga lista de artistas cubanos maravillosos".