Al menos cuatro mujeres se sometieron a abortos ilegales en Cuba en las últimas dos semanas, informó el doctor Ernesto Cordoví, director del Hospital Materno Infantil de Diez de Octubre, conocido como Hijas de Galicia.
Según explicó, las mujeres llegaron al cuerpo de guardia del centro médico en un delicado estado de salud por el uso de misoprostol, una prostaglandina que se usa para aborto farmacológico.
En la isla el aborto es legal desde 1965 pero los cubanos se quejan del mal estado de las instituciones sanitarias y la escasez de medicamentos, insumos y profesionales para atender a los pacientes.
"¿Por qué algunas mujeres permiten el cobro de servicios y no lo denuncian?... No sean cómplices de los que inescrupulosamente lucran con la salud del pueblo, vayan a las consultas de interrupción de embarazo de los Hospitales y si sienten que algo no va bien toquen la puerta del director", dijo Cordoví y decenas de usuarios le contestaron que hay otros factores que no estaba considerando.
"Para un legrado te piden análisis y muchas veces no hay reactivo", explicó una usuaria y detalló los problemas que enfrentan las mujeres para acceder a un aborto, incluido hasta el precio del transporte para trasladarse hasta los centros de salud.
"Te imaginas lo que es llegar a un hospital y que te digan que no te pueden realizar un procedimiento médico porque no hay anestesia o porque no hay una jeringuilla... El tiempo para una regulación es limitado", agregó.
"Esas pastillas no se la dan al pueblo, las venden. Conozco a una amiga que tuvo que dar diez mil pesos por las pastillas y la enfermera se molestó porque había que darle otros mil a del laboratorio por los análisis", apuntó otra.
La venta de medicamentos en el mercado negro ha aumentado considerablemente después de la pandemia, aunque desde mucho antes ya el país no tenía "materia prima" para producir una buena parte de las medicinas que conforman su cuadro básico. El presidente del monopolio farmacéutico estatal BioCubaFarma, Eduardo Martínez Díaz, aseguró a finales del año pasado que la situación seguiría siendo "compleja".
Una búsqueda por grupos de compra y venta en redes sociales y el sitio de clasificados, Revolico, arroja varios resultados para el misoprostol. En uno de ellos, la persona que creó el anuncio aclara que incluye entregas a domicilio en cualquiera de los municipios de La Habana. El tratamiento de 4 tabletas ronda los 3000 CUP.
En 2008 Cuba incorporó ese medicamento como método seguro de efectuar "interrupciones voluntarias". Un artículo del diario estatal Granma en ese momento, detalla que uno de los objetivos de las autoridades sanitarias era reducir los problemas de fertilidad derivados de la elevada práctica de abortos tradicionales que se hacían en el país.
La situación no ha mejorado mucho desde entonces. Según la Encuesta Nacional de Fecundidad divulgada por medios oficiales a mediados del año pasado, entre 2009 y 2022 los abortos y regulaciones mestruales en la isla aumentaron 14 puntos. El estudio, que incluyó a 12.093 personas de 15 a 54 años, concluyó que cerca del 35% de los embarazos no deseados en ese periodo terminaron siendo interrumpidos.
Muchas mujeres en la isla deciden interrumpir o posponer el embarazo debido a la crisis económica que atraviesa el país y las limitaciones para acceder a una vivienda propia, alimentos, medicinas y otros productos de primera necesidad. A ello se suma la violencia obstétrica a la que son sometida durante sus embarazos y el parto, así como en los procedimientos para abortar.
Cuba, que registró en 2023 la cifra de natalidad más baja de las últimas seis décadas, lucha por bajar el alto índice de envejecimiento de su población.
Nota del editor: Martí Noticias se comunicó con la Dirección Municipal de Salud Pública de Diez de Octubre, con la Dirección Provincial de Salud en La Habana y con el Hospital Hijas de Galicia. En ninguna de las llamadas confirmaron o negaron la información sobre las cuatro mujeres, víctimas de abortos ilegales, y refirieron hablar con el doctor Cordoví para más detalles. El especialista no respondió a las preguntas de nuestra redacción (Con reporte de Ivette Pacheco).