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“La policía política es la responsable, ellos fueron los que lo dejaron morir en la prisión. Ellos tenían que haber hecho algo por él, no dejarlo morir. Él dio su vida por una libertad que no tenemos en nuestras manos,” insistió Pelegrino Cabrales en declaraciones a Radio Martí.
Opositores cubanos culparon al gobierno cubano por la “inevitable” muerte del activista, y dijeron que a la lista de trágicos sucesos, hay que sumar a Orlando Zapata Tamayo y Juan Wilfredo Soto, todos fallecidos en los últimos cinco años.
Elizardo Sánchez Santa Cruz, presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, declaró que estas situaciones que han terminado en muertes, tal vez muestren “la poca sensibilidad en asuntos políticos y humanitarios” de “este general tan metido en lo militar.”
“Tiene que ver también con la prolongación del régimen totalitario que está respondiendo al descontento popular con mano de hierro, con más represión cada día que pasa,” señaló el opositor político.
“Raúl Castro es el primer responsable de estas muertes evitables”, afirmó el disidente José Daniel Ferrer, quien aseguró que “Wilman Villar Medoza como Zapata podía haberse salvado si hubiese recibido adecuada atención médica en el momento oportuno. Nunca lo llevaron al hospital y cuando lo hicieron era porque ya no tenía salvación.”
Villar Mendoza de 31 años pertenecía a la Unión Patriótica de Cuba y había sido detenido desde el 14 de noviembre después de participar en una protesta cívica en Contramaestre, su municipio de residencia.
El joven opositor fue sometido a juicio por los delitos de desacato, resistencia y desacato a la autoridad, por lo que recibió una condena de 4 años de cárcel.