De lleno en la campaña electoral

Obama expone su plataforma electoral en Charlotte.

Para ganar las elecciones, Obama necesita motivar a la base de su partido: a las mujeres solteras; a los afro-americanos; a los hispanos; y a los jóvenes.
Al terminar las dos semanas de las convenciones partidistas en Estados Unidos, las elecciones de noviembre parecen encaminadas a un final que se decidirá “por una nariz”.

El Partido Demócrata tuvo una convención muy bien orquestada; con discursos diseñados para estimular la base del partido, que hasta ahora no muestra el mismo entusiasmo que hace cuatro años.

La estrella de la semana fue el ex Presidente Bill Clinton, quien pronunciara uno de los mejores discursos de su larga carrera política. El Presidente Barack Obama, como de costumbre, motivó a sus seguidores en la sala de convenciones en Charlotte, Carolina del Norte.

Pero de la misma forma que la convención republicana tuvo que compartir titulares con el Huracán Isaac, los demócratas despertaron el viernes a una noticia desalentadora.

La economía estadounidense sólo creo 96,000 nuevos empleos en el mes de agosto; muchos menos de los 150,000 que esperaban los analistas y por supuesto muchos menos de los que necesitaba Obama para fortalecer su candidatura ante de los debates con Romney.

El problema de la economía puede cortar el impulso que los demócratas esperaban después de su convención. En Charlotte el partido de Obama estuvo mucho más fuerte que lo que habían logrado los republicanos. Romney no pudo mejorar sus números después de la convención republicana y los demócratas estaban listos para sacarle ventaja a sus rivales.

Entonces, a las 8:30 a.m. del viernes el Negociado de Estadísticas Laborales (BLS por sus siglas en inglés) anunció los números del mes de agosto y dijo que tenía que disminuir de 64,000 a 45,000 los empleos creados en junio y los de julio bajaron de 163,000 a 141,000.

Los demócratas van a decir que el desempleo bajo del 8,3 por ciento al 8,1 por ciento. Es cierto. Pero esas cifras no cuentan las 368,000 personas que abandonaron el mercado laboral en agosto.

De acuerdo a lo publicado el número de personas que participan en el mercado laboral estadunidense ha bajado al 63,5 por ciento; el peor número en más de 30 años.

Los economistas dicen que si la cifra del desempleo tomara en cuenta a las personas que han dejado de buscar trabajo, el desempleo en el país sería del 14,7 por ciento.

Para ganar las elecciones, Obama necesita motivar a la base de su partido: a las mujeres solteras; a los afro-americanos; a los hispanos; y a los jóvenes. Es posible que la convención en Charlotte haya elevado el nivel de entusiasmo en sus partidarios. Si es así, la ventaja en noviembre puede ser del presidente.

Romney necesita ganar los debates. Demostrar que él puede ser la solución a los problemas del país.

Tal como dijo Obama el jueves en la noche, la decisión es del pueblo; un pueblo que se ve ante dos modelos de gobierno diametralmente opuestos. Por eso es que las elecciones de noviembre son tan importantes.