En el poblado de Güira de Melena, en la provincia de Artemisa, con una población de 40 mil habitantes, hace un mes que no está disponible el servicio de agua debido a roturas en las estaciones de bombeo.
En el reparto Pekín, uno de los más poblados del territorio, ante la falta de presión en las tuberías, los residentes están acudiendo a soluciones extremas, informó a Radio Martí el periodista independiente Jorge Bello, quien ha visto a las personas "abriendo huecos en las cañerías, introduciendo mangueras, aspirando (el agua) con la boca".
El periodista añadió que estas prácticas exponen a los residentes a enfermedades al entrar en contacto con las bacterias presentes en las tuberías y zanjas.
Bello dijo que el problema no se ha solucionado debido "a las chapucerías en la reparación del motor (...), la negligencia y mal accionar del gobierno".
Esta situación está provocando afectaciones incluso en el sistema escolar, comentó el activista de la Red Cubana de Comunicadores Comunitarios. "Los círculos infantiles están trabajando a media capacidad", y las escuelas "no se les está haciendo almuerzo a los muchachos".
También hay padres que han decidido "no llevar los hijos a la escuela" porque llevan días sin poder lavar sus uniformes, agregó.
Según el periodista, los residentes no han recibido una respuesta gubernamental ante el grave problema. Las únicas pipas de agua disponibles son privadas, y se venden a 500 pesos en moneda nacional, aseguró.
