Cuba comunicó el miércoles dos nuevos casos de residentes que contrajeron el virus de zika en la isla, con lo que sumarían tres, en un revés para el país caribeño, que ha reforzado las medidas en un intento por prevenir la epidemia.
"El pasado 1ro de agosto se diagnosticaron dos nuevos casos autóctonos de virus de zika, que corresponden a residentes en la ciudad de Holguín sin antecedentes de viajes al exterior, con los cuales suman tres hasta la fecha", anunció el Ministerio de Salud Pública (MINSAP) ayer en un comunicado publicado por medios estatales.
Según la nota, los pacientes están hospitalizados, en buen estado general de salud y con una "evolución favorable".
Agregó el MINSAP que está investigando la zona afectada para identificar la posible existencia de nuevos casos, y que continúa la lucha contra el mosquito transmisor Aedes aegypti.
Desde que el actual brote del virus de zika comenzó el año pasado en Brasil, donde ha sido relacionado con cientos de casos de una inusual malformación congénita, se ha propagado rápidamente por las Américas.
Cuba, que mantiene una campaña sanitaria preventiva a nivel de municipios contra los mosquitos transmisores de enfermedades tropicales, reforzó las medidas para eliminar la variedad del Aedes aegypti, que transmite el virus del Zika, además del dengue, y hasta ahora, sólo había reportado un caso de contagio local.
Las autoridades han ordenado al Ejército que ayude en las fumigaciones, activaron grupos vecinales para revisar si existen aguas estancadas -donde el insecto se reproduce- y habilitaron vigilancia epidemiológica en aeropuertos y otros puntos de ingreso a la isla caribeña, entre otras medidas.
El deficiente suministro de agua en el país obliga a los cubanos a llenar y mantener depósitos del vital líquido en sus hogares, lo que complica la labor de los trabajadores de la campaña contra el mosquito, que deben inspeccionar dichos depósitos en busca de larvas, así como flamearlos y colocarles un larvicida.