Aunque al virtual candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, le pareció “bien” (“aunque deberíamos conseguir un acuerdo mucho mejor”) la apertura del presidente demócrata Barack Obama hacia Cuba, la plataforma del Partido que se espera nomine a Trump este martes para las elecciones de noviembre se afinca en las posiciones tradicionales de la organización hacia el gobierno comunista de la isla y su opresión del pueblo cubano.
A continuación la traducción de los párrafos sobre Cuba de la Plataforma Republicana 2016, bajo el subtítulo La Familia de las Américas:
“Deseamos dar la bienvenida de regreso a nuestra familia hemisférica al pueblo de Cuba, después que sus corruptos gobernantes hayan sido desalojados del poder y llevados a rendir cuentas por sus crímenes contra la humanidad.
Respaldamos a las Damas de Blanco y todas las víctimas del despreciable régimen que se aferra al poder en La Habana. No lo decimos a la ligera: ellos han sido traicionados por aquellos que controlan actualmente la política exterior de EE.UU. La “apertura hacia Cuba“ de la actual Administración fue un acomodo vergonzoso a las demandas de sus tiranos. Solamente fortalecerá su dictadura militar.
Llamamos al Congreso a hacer cumplir las leyes vigentes de los EE.UU. que establecen condiciones para el levantamiento de las sanciones a la isla: legalización de los partidos políticos, prensa independiente, y elecciones libres y limpias con supervisión internacional.
Abogamos por una plataforma consagrada a las transmisiones de Radio y TV Martí y por la promoción del acceso a Internet y tecnologías de sorteo de los controles, como herramientas para fortalecer al movimiento pro-democracia cubano.
Apoyamos la labor de la Comisión para Asistencia a una Cuba Libre y sostenemos los principios de la Ley de Ajuste Cubano de 1966, reconociendo los derechos de los cubanos que huyen del comunismo.
La plataforma reafirma así la política migratoria para los cubanos del presidente Lyndon B. Johnson; el compromiso de Ronald Reagan con ofrecer al pueblo de la isla noticias e información sin censura; la preeminencia de la ley Helms-Burton, promulgada por Bill Clinton, y la ayuda para reconstruir una Cuba libre prevista por George W. Bush, además de resaltar el importante papel de la Internet y de facilitar a los cubanos su acceso más allá de los controles del gobierno.