La falta de información sobre el estado de salud de Tomás Núñez Magdariaga, quien cumple este sábado 60 días en huelga de hambre, es otra gran preocupación para familiares y amigos del opositor quienes temen por su vida.
Yennisey Jiménez, amiga y vecina del huelguista, dijo este sábado a Radio Martí que se encuentra junto a Nurvia Núñez, sobrina del opositor, en el hospital Juan Bruno Zayas de Santiago de Cuba, en espera de tener acceso a la sala de penados donde está internado Magdariaga.
Ambas se encuentran sumamente frustradas al no poder ver al huelguista, quien desde esta semana se ha negado a recibir atención médica y su cuadro de salud empeora cada día.
"La doctora que lo atiende aseguró que tiene la vista borrosa y que a partir de ahora pueden empezar a fallar los órganos", relató Jiménez.
El oficial de la Seguridad del Estado, no da la cara, para aclararle a los familiares cuál es la situación legal del opositor, dijo la activista.
El líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), José Daniel Ferrer, expresó en twitter su convicción de que el régimen cubano no ha tomado interés alguno en evitar que esta protesta tenga una desenlace fatal.
"Sin dudas la tiranía quiere que Tomás Núñez Magdariaga muera en huelga de hambre. La única explicación de tan torpe y cruel proceder es que Raúl Castro quiera que @DiazCanelB tenga también sus muertos. Raúl dirá: Fidel tuvo muchísimos, yo también. Canel que tenga los suyos", escribió en Twitter.
La acción de protesta de Magdariaga es en reclamo de su libertad, tras ser injustamente condenado a un año de prisión por el delito de “amenaza”.
El caso de Núñez Magdariaga ha llamado la atención del Arzobispo de Santiago de Cuba, el Departamento de Estado de Estados Unidos, la Organización de Estados Americanos (OEA), Amnistía Internacional y el diputado español Fernando Maura entre otros.
[A partir de entrevista realizada por Idolidia Darias e información de redes sociales]