El Consejo de Seguridad autorizó el miércoles de forma unánime la misión política de Naciones Unidas en Colombia para ayudar a verificar la implementación del acuerdo de cese del fuego entre el gobierno y el Ejército de Liberación Nacional, el mayor grupo guerrillero que aún queda en el país.
El organismo también expresó su voluntad para hacer lo mismo en caso de que se concrete una tregua con otro grupo armado, el Estado Mayor Central.
Naciones Unidas ha estado monitoreando un acuerdo de paz concretado en 2016 entre el gobierno y el que fuera su mayor grupo rebelde, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). El pacto puso fin a más de 50 años de guerra en los que murieron más de 220.000 personas y casi 6 millones de habitantes fueron desplazados.
Más de 14.000 guerrilleros de las FARC depusieron las armas en virtud de dicho acuerdo, pero la violencia entre algunos grupos rebeldes ha ido en aumento en algunas partes de Colombia.
El gobierno colombiano solicitó al consejo que extendiera el mandato de la misión de verificación de la ONU para incluir la tregua alcanzada en junio con el ELN. El grupo rebelde fue fundado en la década de 1960 por líderes sindicales, estudiantes y sacerdotes inspirados por la revolución cubana.
El Consejo de Seguridad dijo que dicho acuerdo "debería contribuir a mejorar la situación humanitaria en zonas afectadas por el conflicto" y alentó a ambas partes a "seguir fortaleciendo la protección de civiles en apego a las leyes humanitarias internacionales".
La misión política de la ONU, cuyo mandato de un año expira el 31 de octubre, cuenta con 120 observadores. La resolución autoriza el envío de hasta 68 observadores más y "un componente civil apropiado" para asumir las labores adicionales de verificar el cese del fuego con el ELN.
El consejo expresó su disposición para sopesar una nueva expansión de la misión de la ONU en caso de que se concrete un acuerdo entre el gobierno colombiano y el Estado Mayor Central. El grupo es encabezado por excomandantes de las FARC que se negaron a sumarse al acuerdo de paz de 2016.
El gobierno de Colombia ha ordenado a sus fuerzas armadas poner fin a los ataques contra varios grupos armados en el país, con el propósito de iniciar diálogos de paz simultáneos con distintos grupos.
El coordinador político británico Fergus Eckersley, cuyo país patrocinó la resolución, dijo al consejo después de la votación que su implementación unánime "demuestra el compromiso continuo del Consejo de Seguridad con la paz en Colombia".
El embajador adjunto de Rusia, Dmitry Polyansky, dijo que la resolución fue oportuna al producirse poco antes de que entre en vigor el cese del fuego entre el gobierno y el ELN.
El embajador brasileño Sérgio França Danese dijo que la misión de la ONU puede desempeñar "un papel particularmente importante" en respaldo al diálogo nacional en Colombia para el beneficio de la paz y para ayudar a implementar las treguas.
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