Activistas de diferentes regiones de Cuba comentan en las redes sociales sobre las multas que están imponiendo a la población por quitarse el nasobuco en la calles al tiempo que critican a los policías que no siempre los usan.
En el poblado de Caimito, provincia de Artemisa, la ciudadana Marisleidis Vázquez Sablón deberá pagar 150.00 pesos cubanos de multa impuesta este jueves por quitarse el nasobuco para tomar helado, dijo a Radio Televisión Martí la Dama de Blanco Oylín Hernández Rodríguez.
"Es una mujer humilde, madre de dos niños que estaba haciendo una interminable cola para comprar alimentos y fue a tomarse algo en Coppelia pero ahí mismo llegó la policía le pidió el carnet y la multó", explicó.
La Dama de Blanco señaló que el artículo que le impusieron fue el relativo a "violar el cordón se seguridad cuando ella no ha cometido esa infracción".
Hernández calificó de "indignante" esas acciones de los policías que andan en las calles y muchas veces ni los llevan puesto.
A criterio de la Dama de Blanco en esta etapa tan difícil no es momento de reprimir, ni acosar a la ciudadanía.
Pero no es solo en Caimito donde la policía no predica con el ejemplo, según muestra una foto publicada el 14 de abril en Facebook por una ciudadana.
Con el título: "En Alamar los que incumplen la ley se visten de azul". relata que salió sin nasobuco a la calle a pocos metros de su casa en una zona por donde no transitaba nadie y la llevaron a la estación de Policía.
Agregó que cuando llegó al lugar "habían muchas sillas, que no se encontraban distanciadas, pero las pocas personas que habían en el recinto las arreglamos para dejar una silla de por medio y mantenernos distanciados".
Señaló que entre las personas del salón se encontraban dos mujeres más. "Una de ellas me explica que la llevaron a la estación porque se bajó el nasobuco para hablar por teléfono, sin embargo la otra se lo había bajado para tomar agua", relató en su perfil de Facebook la mujer.
En el poblado de Minas, provincia de Camaguey hoy también un joven de 20 años resultó multado, según el reporte que desde allí nos hizo llegar Adrián Quesada activista de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU).
Abran Regino Aviles fue multado con 300 pesos por "quitarse el nasobuco para comer", dijo Quesada. "Me contó que cuando fue a reclamar lo llevaron para la estación de policía donde le informaron que la multa es por "propagación de epidemia" , precisó el activista.
En la ciudad de Pinar del Río los residentes han estado bajo el asedio de las autoridades que recorren constantemente las calles para multar a los que en algún momento no porten el nasobuco, pero según denunció el activista Michael Valladares, es frecuente ver a los policías andar sin ellos.
