El éxodo de maestros de las aulas cubanas principalmente hacia otros sectores mejor remunerados es uno de los problemas que enfrenta el sistema educativo en la isla donde 6.938 docentes causaron baja en el pasado curso 2013-2014, según datos oficiales publicados hoy en el semanario "Trabajadores".
Ese problema presente desde hace varios años en el sector "no solo impide la total cobertura sino que incide en la calidad del proceso educativo", señala la publicación, órgano oficial de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC, sindicato único).
El salario insuficiente, el exceso de burocracia, el escaso reconocimiento social o la incomprensión familiar son algunos de los argumentos expuestos como razones para abandonar la profesión citados en el artículo.
El secretario general del sindicato de la Educación, Ismael Drullet, precisó que el fenómeno resulta "muy complejo" porque, en su opinión,"no se comporta de la misma manera en todos los territorios, ni tiene las mismas causas".
"Hay provincias más amenazadas que otras y ello guarda relación con el propio desarrollo socioeconómico. El maestro es un profesional preparado, disciplinado y siempre está tentado a abandonar la escuela para desempeñar otras funciones", señaló, al tiempo que reconoció que el personal "está afectado" en el aspecto económico.
Sobre el problema de la permanencia del personal docente, la directora de un centro escolar en la provincia de Cienfuegos, Maileny Quintana, consideró que la cobertura no se mantiene estable por "la falta de responsabilidad y, tal vez por el asedio de otros sectores que ofertan mejor salario, incluso vestuario.
"No hay que olvidar que en estos momentos la situación económica es determinante", dijo, y también señaló que "el burocratismo es de los factores que más incide de manera negativa. Otra cosa es el excesivo papeleo, y el plan de clases que en ocasiones es muy riguroso".
Cuba abrió el curso escolar 2014-2015 el pasado 1 de septiembre con casi dos millones de estudiantes en 10.366 escuelas y cerca de 172.000 maestros, el 93,1 por ciento de la plantilla requerida que es de 183,100, es decir, faltan más de 10.800 docentes, según datos del Ministerio de Educación.
Las autoridades del sector han calificado de "vital" y "alta prioridad" la cobertura docente, y como alternativa para suplir el déficit de maestros han acudido a la contratación de docentes jubilados, directivos del sector y personal calificado en determinadas áreas.
Desde hace varios años la falta de maestros y la baja calidad de las clases son aspectos que han generado preocupación en la isla, donde el número de estudiantes representa casi una quinta parte de la población y la educación es de carácter universal y gratuita.