Ante la inminente amenaza de desalojo, ocupantes ilegales de un edificio en La Habana Vieja advierten que se plantarán en la Plaza de la Revolución o el Parque Central hasta encontrar una solución a su caso.
En septiembre de 2019, un grupo de seis mujeres y 12 niños, todos residentes de la capital, decidieron ocupar ilegalmente una propiedad de la Oficina del Historiador, ubicada en la calle Inquisidor 405, que había sido abandonada desde el 2016.
Los ocupantes perdieron sus viviendas por derrumbes. Algunos de ellos se encontraban albergados, mientras que otros permanecieron en sus viviendas dañadas ante la falta de respuesta de las autoridades.
Ocho meses llevan allí, y el viernes último se personaron en el lugar funcionarios de la vivienda del municipio, quienes informaron a estas familias que tenían 72 horas para abandonar el local voluntariamente. De no cumplir con la orden serían desalojados, reporta el periodista Vladimir Turró.
Un funcionario de la Dirección Municipal de Vivienda de La Habana Vieja “se presentó allí y les llevó una carta”, dijo Turró, pero al leer lo que decía "se negaron a firmar". Los funcionarios pusieron como requisito que abandonaran el local y regresaran a sus viviendas anteriores para recibir una solución futura a sus casos.
"Están esperando que, a partir de hoy, en cualquier momento suceda lo peor", añadió el comunicador.
Los ocupantes del edificio fueron informados de que el 60% del fondo habitacional de la capital tiene algún tipo de daños y que tendrían que esperar, algo que no es una alternativa para una de las ocupantes, comenta Yeima de los Santos Vázquez en entrevista con el portal digital CubaNet.
"Ir a la Plaza [de la Revolución] con los niños, es la última opción que nos queda", afirmó.
El también comunicador Enrique Díaz señala que estas mujeres llevan años reclamando ayuda sin éxito. "Estas mujeres son como tantos cubanos que no tienen recursos. Siempre han vivido en la pobreza, algunas en albergues en muy malas condiciones (...) Le piden al Gobierno que, por favor, las ayude [pero] son desoídas por completo".
Y sobre lo expresado por los funcionarios, que debían regresar a sus lugares de origen, Reina Sierra Duvergel, otra de las ocupantes, dijo a CubaNet no tener opciones.
"Setenta y dos horas para desalojar esto, y cada cual para su vivienda. Yo ahora mismo no tengo ninguna, ¿para cuál voy a ir? Y en la situación que estamos viviendo, con coronavirus, sin trabajo, para dónde vamos a ir, ¿para el Parque Central? Si es pa´allí voy pa´l Parque Central, con mis tres nietos", aseveró.
En diciembre de 2019, en la sesión de la Asamblea Nacional del Poder Popular, la Comisión de Industria, Construcción y Energía reportó un déficit superior a las 900 mil viviendas en Cuba. Durante el período solo se terminaron 43,700.