El Departamento de Estado de Estados Unidos está aceptando candidaturas de entidades dispuestas a ejecutar un programa financiado con $5 millones para ayudar a capacitar a emprendedores de naciones de América Latina y el Caribe, incluyendo a Cuba.
El programa titulado FY2016 Special Professional Fellows Program (Programa Especial para Asociados Profesionales del año fiscal 2016) asigna una cuota inicial de hasta 15 cubanos en el cupo para 250 jóvenes emprendedores sociales o de negocios de 28 países.
Los becarios pasarían entre cinco y seis semanas recibiendo entrenamiento en Estados Unidos para impulsar su trabajo y establecer vínculos duraderos con sus similares estadounidenses.
Luego, sus anfitriones, generalmente miembros de empresas u organizaciones no gubernamentales del ramo correspondiente, viajarían a los países de origen de sus becarios para continuar ayudándolos con sus iniciativas individuales o conjuntas.
Aunque el programa, que apoya la Iniciativa para Jóvenes Líderes de las Américas (YLAI) lanzada en abril por el presidente Obama, se encuentra aún en la fase inicial de licitación (el primer grupo llegaría a EEUU en 2016), y todavía no existe un formulario de solicitud online para los interesados, la información del Buró de Asuntos Culturales y Educacionales de la Cancillería sí precisa los requisitos que deben reunir los participantes.
Estos deben ser emprendedores de negocios o emprendedores sociales emergentes, de 21 a 35 años de edad, con una trayectoria demostrada de al menos dos años de experiencia reciente o actual (preferiblemente exitosa), ya sea en empresas emergentes con fines de lucro o con propósitos sociales.
Deben ser capaces de hablar y escribir inglés de nivel laboral y demostrar con un plan de negocios y/o datos sobre inversiones recientes, número de empleados, impacto social y otros su compromiso con el desarrollo y dirección de una empresa viable.
Los empresarios de negocios con fines de lucro deben poder demostrar cómo estos (1) ayudarán a reducir el desempleo, sobre todo entre los jóvenes, y/o (2) crearán oportunidades económicas para comunidades en riesgo.
Los emprendedores sociales (sin fines de lucro) deben tener experiencia en una o más de las siguientes áreas: (1) aliviar el desempleo juvenil; (2) creación de alternativas positivas y oportunidades económicas para los jóvenes en situación de riesgo; (3) aumento de la inclusión social; o (4) promoción de la transparencia y la lucha contra la corrupción.
Las entidades encargadas de ejecutar el programa seleccionarán a los becarios, junto con el Buró de Asuntos Culturales y Educacionales del Departamento de Estado.