El periodista independiente Guillermo del Sol cumple este jueves 39 días en huelga de hambre exigiendo al gobierno cubano que deje de prohibir la salida del país a miembros de la sociedad civil independiente y a todo aquel que piensa diferente a sus políticas.
"Muy decaído (...), no tengo fuerzas casi. Tomo pequeñas cantidades de agua pero me da mucho asco, muchas náuseas y deseos de vomitar", dijo el huelguista con la voz entrecortada.
Del Sol dijo a Radio Martí que Mara Tekach, encargada de negocios de la embajada estadounidense en La Habana, mantiene comunicación constante con él para interesarse por su salud. "Ha mostrado preocupación y ha estado al tanto de la situación", señaló.
Del Sol dijo que el reto que el exgobernante cubano Raúl Castro le ha planteado se mantiene hasta las últimas consecuencias. "Voy a seguir reclamando hasta el último día porque se cumpla lo expuesto en la Constitución", aseveró.
El activista comenzó su protesta pacífica el 12 de agosto, después de que en el aeropuerto José Martí de La Habana las autoridades de migración prohibieran a su hijo, Adrián del Sol Alfonso, abordar un vuelo con destino a Trinidad y Tobago, donde participaría en un evento sobre libertad religiosa. Al despachar su equipaje el joven fue informado de que estaba "regulado".
Este miércoles, Michael G. Kozak, Subsecretario Interino para Asuntos del Hemisferio Occidental de la cancillería estadounidense, instó al régimen cubano a responder a las demandas del activista cubano.
“Estamos profundamente preocupados por la salud del activista Guillermo del Sol en Cuba, que está en huelga de hambre. Instamos al gobierno de Cuba a que aborde sus preocupaciones, y las de todos los cubanos que exigen el respeto de sus derechos humanos”, declaró Kozak.
(Con reporte de Ivette Pacheco para Radio Martí)
