El opositor cubano José Daniel Ferrer pudo ver a su familia por tan solo dos minutos el 12 de julio en la prisión de Mar Verde, en Santiago de Cuba, luego que sus familiares denunciaran la total incomunicación en que lo mantuvieron durante más de 30 días.
Su esposa Nelva Ismaray Ortega Tamayo, explicó las condiciones en que lo encontró en la cárcel en un video publicado en las redes sociales del líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU).
La médico de profesión relató: “Después de una larga y exhaustiva requisa, nos llevaron a los calabozos, o cerca de donde está el calabozo de mi esposo y según ellos, era un minuto. Nosotros nos tomamos dos minutos, pudimos verlo ahí de pie, lo pudimos ver que estaba semidesnudo, estaba en camiseta y calzoncillos, lleno de lesiones de mosquito por picaduras de mosquito'.
La señora aseguró que Ferrer le confirmó que las autoridades lo mantuvieron aislado del resto de la población penal durante todo el tiempo en que no tuvieron noticias de él.
Ortega Tamayo aseguró que el también presidente de Consejo Para la Transición Democrática en Cuba ha estado “exigiendo sus derechos y libertades, derecho a que se respeten las visitas familiares y conyugales y que sean mensuales".
La doctora señaló los padecimientos de salud que han venido aquejando al opositor desde su encarcelamiento: "Se mantiene la misma sintomatología, los fuertes dolores de cabeza, los sonidos ensordecedores por los ataques sónicos, los calambres en las manos, la misma pérdida de la visión, el mismo hecho de que tiene que exigir que le den el medicamento sino, no se lo dan, que más de tres meses lleva sin que le saquen al sol, no solamente le tienen aislado sino incluso le hacen actos de repudio".
"En la vísperas del 11 de julio le hicieron un acto de repudio y por supuesto, dice que él también le respondió desde la celda", denunció.
"Nosotros seguiremos exigiendo por sus derechos, porque se cumplan derechos que le están violando desde el primer momento y su libertad inmediata e condicional. Libertad inmediata para él y para todos los presos políticos", exclamó la mujer.
Ferrer está preso desde el 11 de julio de 2021 cuando intentó unirse a las protestas populares de ese día en Santiago de Cuba. Tras ser apresado, le fue revocada la medida cautelar de prisión domiciliaria por una sanción previa que cumplía.
Numerosos grupos de derechos humanos y gobiernos como el de Estados Unidos y los países de la Unión Europea han reiterado el reclamo al régimen de La Habana para que libere al preso político, que fue encarcelado también durante la “Primavera Negra de Cuba” en 2003.