Roger Federer y Rafael Nadal ganaron este martes sus partidos en la tercera ronda del Abierto BNP Paribas que se disputa en Indian Wells y se enfrentarán esta tarde (después de las 5, hora estándar del este) en un duelo en el que el tenista español buscará una revancha por la derrota que sufrió ante el suizo en la final del Abierto de Australia.
Nadal -quinto preclasificado- venció a su compatriota Fernando Verdasco por 6-3 y 7-5, mientras que Federer superó al estadounidense Stevie Johnson por 7-6 (3) y 7-6 (4).
En su último duelo de enero en Melbourne, Federer reclamó su décimo octavo título de Grand Slam al imponerse por 6-4, 3-6, 6-1, 3-6 y 6-3 sobre Nadal.
Esta fue la victoria número 50 en el Indian Wells Tennis Garden para Nadal, que ha levantado el trofeo en tres ocasiones, en 2007 (frente al serbio Novak Djokovic), en 2009 (frente al escocés Andy Murray) y en 2013 (frente al argentino Juan Martín del Potro).
"La historia dice que este torneo funciona bien para mí", dijo Nadal a la prensa.
Federer también ha disfrutado de sus visitas a Indian Wells, donde se ha coronado en cuatro ocasiones, por última vez en 2012.
Djokovic, tres veces defensor del título, también tuvo razones para celebrar tras derrotar a Juan Martín del Potro por 7-5, 4-6 y 6-1.
Zidane: "Cuando era jugador me decía que jamás sería entrenador"
El técnico francés del Real Madrid, Zinedine Zidane, aseguró que cuando era jugador se dijo así mismo que "jamás sería entrenador" pero que tras retirarse se dio cuenta que "el lugar donde quería estar realmente era en el campo".
"Cuando me retiré como futbolista me dediqué a otras cosas y aunque siempre estuve dentro del fútbol y cerca del Real Madrid, me di cuenta que el lugar donde realmente quería estar era en la cancha. Entonces, empecé a prepararme para convertirme en entrenador. Y ahora es lo que más me gusta", dijo Zidane en una
entrevista con FIFA.com.
Cuando fue elegido para dirigir al Real Madrid, tras estar en el banquillo del filial, Zidane comentó que sabía que la tarea "iba a ser realmente difícil". "Había sido técnico del segundo equipo del club pero tenía clarísimo que estaba pasando a una dimensión completamente distinta", subrayó.
Pero se "sentía preparado" porque "conocía la casa". "Tras 15 años en el club sabía lo que significaba ese vestuario y el club en general. Lo que restaba era trabajo y más trabajo. Había que hacer valer mis ideas, y ahí están los resultados", explicó.
En tan solo un año como técnico madridista, el francés sumó al palmarés del club blanco tres títulos (Liga de Campeones, Mundial de Clubes y Supercopa de Eupa) algo que reconoció que "no esperaba que sucediera tan pronto", aunque "lo deseaba".
"Cuando uno está en el Real Madrid se espera que hagas el máximo para conseguirlo todo, así que la exigencia era altísima desde que llegué. Soy consciente que haber ganado la Liga de Campeones en mi primer año fue algo extraordinario", apuntó.
"Ahora estamos luchando por repetir y también por ganar el título de liga. Es lo que pasa con el fútbol, no se detiene nunca. Los títulos quedan rápidamente en el pasado y siempre hay que confirmar", añadió el francés.
A pesar de haber alcanzado los éxitos más importantes como jugador y como técnico, Zidane explicó que los triunfos se viven "de forma parecida" pero "no exactamente igual" porque "no es el mismo trabajo ni las mismas circunstancias". "La emoción sí es la misma, pero diría que se disfrutan un poco más como entrenador, porque es más difícil conseguir esas victorias", apuntó.
"Como jugador sólo te preocupas de ti mismo, de lo que haces en el terreno de juego, pero no demasiado del resto del equipo. Como entrenador, en cambio, tienes que ocuparte de todo el grupo, de 24 jugadores, y no sólo de ellos, sino de lo que pasa alrededor de un partido de principio a fin", recalcó.
Para Zidane la "mejor muestra de la mayor dificultad", como técnico, es que "la cantidad de horas que dedicas al día al fútbol es mucho mayor".
Por último, el francés recordó su etapa como futbolista: "Fue hermosa, me encantaba ser jugador. Pero el tiempo obligó a que esa etapa se terminara sí o sí, no había más remedio. Ahora sigo viviendo de mi pasión, de lo que más me gusta hacer, así que no tengo nada de que quejarme".
(Con información de EFE y Reuters)