El desastre humanitario en Guantánamo tras las inundaciones causadas por el huracán Oscar podría agravarse por el peligro de brotes de Oropouche y otras enfermedades infecciosas, alertaron este miércoles las autoridades sanitarias.
El director de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (Minsap), Dr. Francisco Durán, alertó a los residentes en las zonas afectadas sobre la necesidad de hervir el agua "con los recursos que tengamos" antes de ingerirla.
El Dr. Durán también instó a cocinar bien los alimentos.
"Muchos alimentos se echaron a perder. Los que nos queden en estos momentos, cocinarlos. Me mirarán así y dirán (cocinarlos con qué)... Cocinarlos con leña, con los recursos que tengamos", insistió el epidemiólogo.
Dos médicos residentes en el oriente de Cuba dijeron este jueves a Martí Noticias que la situación sanitaria en esa región del país es compleja.
"El escenario epidemiológico es mortal en las zonas afectadas por el ciclón, con todas las condiciones para el desarrollo de vectores y enfermedades de todo tipo. Imagínate, cuando no se puede contar con agua de calidad ni conservar los alimentos adecuadamente", señaló el Dr. santiaguero Roberto Serrano.
Según el galeno, existe un sinnúmero de enfermedades de transmisión hídrica que florecen en ambientes similares y se pueden presentar en estas áreas afectadas por el huracán, donde las condiciones son extremas, sin acceso a medicamentos y con brotes recientes de dengue y Oropouche.
La situación allí "está fuera de control", afirmó el Dr. Serrano. Las autoridades no están realizando ninguna acción sanitaria ni de control de vectores ", añadió.
Desde Holguín, el médico opositor Eduardo Cardet dijo que los guantanameros damnificados por el huracán "están a merced de Dios", sin recursos de ningún tipo. "Las posibilidades de que se infecten con algunas de las enfermedades diarréicas, respiratorias y virales son extremadamente grandes", subrayó.
El Dr. Cardet explicó que muchos habitantes de las zonas intrincadas en Imías y San Antonio del Sur no disponen siquiera de baños sanitarios. "El escenario es, sinceramente, catastrófico, sobre todo para la proliferación de enfermedades de todo tipo".
Ni agua, ni alimentos
Guantanameros afectados por la estela de destrucción que dejó el ciclón en el extremo oriental de Cuba se han quejado de la falta de recursos esenciales, como alimentos, agua potable y combustible para cocinar. Cientos de familias lo perdieron todo en las severas inundaciones de San Antonio del Sur e Imías, que dejaron un saldo de siete muertos, según cifras oficiales, y un número no identificado de desaparecidos.
Una residente en una de las localidades afectadas que visitó el miércoles Miguel Díaz Canel con una comitiva de gobierno, reclamó al gobernante que no tenían agua potable ni para darle de tomar a los niños. Díaz-Canel dijo que la ayuda estaba en camino.
Este jueves, el diario local Venceremos informó de "una operación aérea para el traslado de alimentos en dirección a Imías" y publicó imágenes de militares cargando un helicóptero con algunos insumos.
De acuerdo con cifras oficiales, más de 4.000 núcleos familiares permanecían aislados en Imías y pocas posibilidades de recibir ayuda hasta que se restablezca el acceso por tierra, afectado por carreteras y puentes bloqueados.
Sobre las enfermedades asociadas a situaciones de desastre como las que viven los guantanameros en estos momentos, Durán mencionó diarreas y cuadros respiratorios. Alertó además, que con el agua que quedó acumulada tras las inundaciones e intensas lluvias, se incrementarán los criaderos de mosquitos.
"Y el dengue y el Oropouche, que no han dejado de estar presentes en estos momentos, se puede incrementar", subrayó.
La región oriental de la isla se ha visto particularmente afectada por estas enfermedades infecciosas desde que un brote de Oropouche fue detectado en mayo pasado en Santiago de Cuba. Las cifras de contagios se ha incrementado.
La semana pasada, las autoridades informaron de más de 17.000 pacientes ingresados en Cuba por dengue en 2024. Del total, más de 3.000 requirieron hospitalización. Médicos de la isla entrevistados por Martí Noticias alertaron que las cifras son todavía más graves, y que las autoridades del Minsap no tienen un Plan eficaz para reducir el impacto en la población de estas enfermedades.
(Incluye reporte de Tomás Cardoso para Radio Martí)
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