La Dama de Blanco Aymara Nieto Muñoz continúa en una celda de castigo, y sin tener acceso a sus pertenencias, en la cárcel de mujeres de Manatí, en la oriental provincia de Las Tunas, declaró a Radio Televisión Martí su esposo, el expreso político Ismael Boris Reñí.
Nieto Muñoz fue traslada en marzo a ese centro penitenciario, a más de 600 kilómetros de su casa, tras un motín ocurrido en la prisión del Guatao, en La Habana, donde cumplía una sentencia de cuatro años por los delitos de "atentado, daño y desacato".
Según Reñí, quien es miembro de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) y fue liberado recientemente, "Aymara se ha comunicado conmigo. Cuando a ella la detuvieron, la dejaron sin sus pertenencias, sin nada. Imagínate cómo debe estar ella en este momento..."
Comentó que ha coordinado para ver cómo le puede hacer llegar a la prisionera política lo que es necesario en la prisión.
Sobre la conversación con su esposa, Reñí amplió que "no pude hablar mucho con ella. Le pregunté sobre qué cosas le hacían falta. Ella no tiene nada, ni blúmers, ni ajustadores, ni un jarro y una cuchara..., pero no hay manera de llevarle nada porque no hay transporte".
Tras salir de la prisión el pasado 27 de marzo, Reñí comentó que tenía por delante la gran tarea de abogar por la libertad de su esposa y de todos los presos políticos que cumplen injustas condenas en las cárceles de Cuba.
Reñí se encontraba en una cárcel de Melena del Sur, en la provincia de Mayabeque, cumpliendo una sanción de dos años de prisión por un cargo de "desacato a la autoridad".
Su esposa, quien es también activista de la UNPACU, fue sentenciada en abril del 2019 por el Tribunal Municipal de Boyeros a cuatro años de cárcel.
(Esta nota fue elaborada con una entrevista de la reportera de Radio Televisión Martí Ivette Pacheco)