La Dama de Blanco María Cristina Labrada fue liberada en la noche del lunes, tras pasar varias horas detenida en unidades policiales de la capital cubana. En el testimonio dado a Radio Martí, Labrada alertó sobre la violencia policial con la que fue tratada la activista Lourdes Esquivel, quien también fue arrestada.
“Saliendo de allí, de la sede nacional (de la organización opositora Damas de Blanco) sobre las once de la mañana, fuimos interceptadas con un aparatoso operativo en la Avenida Porvenir y Dolores, con carros de patrulla, con carros de la Seguridad del Estado […] y un hombre de la Seguridad del Estado, muy violentamente, se abalanzó contra Lourdes (Esquivel) para quitarle el teléfono”, dijo Labrada.
Según el testimonio ofrecido a Radio Martí por la Dama de Blanco, “eso fue terrible allí en esa esquina, porque todo el mundo se quedó mirando cómo aquel hombre le trataba de quitar el teléfono a Lourdes. Le dijo (el oficial) ‘Apaga el teléfono”, y ella le dijo: ‘Lo voy a apagar’, pero aquel hombre”, explicó Labrada, “era feroz”.
Como resultado de la pugna por el teléfono, Esquivel terminó con el brazo seriamente lastimado. De acuerdo con el relato de su acompañante, el oficial “le viró el brazo y, de hecho, en estos momentos ella (Esquivel) está con muchos dolores”.
Labrada relató que fueron trasladadas “a la Unidad de Policía de (la calle) Aguilera”, donde les dicen a ambas opositoras “que está prohibido entrar allí, a la sede, puesto que ellos tienen un operativo”.
A partir de ese momento, Labrada perdió el contacto con Esquivel. Sobre las cuatro de la tarde, fue trasladada a la Unidad de Policía de Cojímar, de donde fuera liberada “alrededor de las 8:40 de la noche”.
“Una vez más, nosotras, las Damas de Blanco, pedimos que se acabe la violencia en Cuba contra las mujeres. Nosotras, en Cuba, necesitamos una Ley de Protección; necesitamos que nos protejan, porque hoy fue Lourdes, mañana puede ser cualquiera”, concluyó Labrada.
(Con reporte de Ivette Pacheco para Radio Martí)