Al menos 127 personas están encarceladas en Cuba por motivos políticos, 22 de ellas en los últimos seis meses, de acuerdo con el más reciente informe de Cuban Prisoners Defenders.
En esa cifra, en la que se destaca el caso del líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), José Daniel Ferrer, la organización identifica a 74 prisioneros de conciencia, 24 condenados en esa categoría y 29 presos políticos adicionales.
Cuban Prisoners Defenders (CPD) denuncia igualmente la existencia de unos 11,000 cubanos no pertenecientes a la oposición (8,400 convictos y 2,538 condenados) que se encuentran en prisión por cargos calificados de "predelictivos", es decir, "sin delito".
La ONG subraya que desde finales del 2018 la represión, el control y la retórica de guerra fría del régimen de La Habana ha ido en aumento.
La organización atribuye esta situación al intento de controlar a una población "mayoritariamente desafecta del sistema imperante, incluso entre los cuadros, y a una opinión pública internacional que cada vez es menos manipulable".
CPD considera en su informe que las violaciones de derechos humanos en Cuba han cobrado "una difusión sin precedentes", gracias a "una unidad de criterio diplomático y político" a nivel mundial como hace muchos años no ocurría.
