El Gobierno de Cuba reaccionó a las sanciones impuestas el lunes por la Casa Blanca contra siete funcionarios venezolanos que participaron en la represión de las protestas de 2014 en Venezuela con una "Declaración del Gobierno Revolucionario de La República De Cuba" difundida por los medios oficiales.
La nota califica de "arbitraria y agresiva" la Orden Ejecutiva emitida por el presidente Obama, afirmando que se trata de una "represalia por las medidas adoptadas (por el Gobierno de Maduro) en defensa de su soberanía".
Cuestiona asimismo como "poco creíble" y reveladora del "carácter injerencista de la política exterior estadounidense" la afirmación de la proclama presidencial con respecto a que Venezuela representa una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos.
El texto reitera un "incondicional apoyo (…) a la Revolución bolivariana, al gobierno legítimo del Presidente Nicolás Maduro Moros y al heroico pueblo hermano de Venezuela" y manifiesta que "nadie tiene derecho a intervenir en los asuntos internos de un Estado soberano" un punto que La Habana ha estado enfatizando en sus negociaciones para restablecer relaciones diplomáticas con Estados Unidos.
La respuesta oficial fue complementada en los medios oficiales de la isla con cinco renglones escritos cerca de la medianoche por el ex gobernante Fidel Castro, en los que felicita a Maduro por su discurso "frente a los brutales planes del Gobierno de Estados Unidos".
