El tribunal provincial de Holguín emitió este lunes el fallo definitivo a la apelación de los hermanos Adairis y Anairis Miranda Leiva (mellizas) y Fidel Batista Leiva, activistas del Movimiento Cubano Reflexión (MCR), sancionados en enero a un año de cárcel por "difamación de las instituciones y los mártires de la patria" durante el duelo por la muerte de Fidel Castro.
Los opositores fueron también acusados de "desorden público".
Tras concluir el juicio, Anairis Miranda explicó a Martí Noticias que el tribunal tiene ahora un término de 15 días hábiles para pasar la sentencia al tribunal municipal, y este tiene a su vez una semana para citarlos, y que les den la fecha de traslado a la cárcel.
"Al juicio asistieron decenas de agentes de la seguridad del estado, oficiales del Ministerio del Interior, policías de Holguín y siete testigos que llamó la fiscalía para testificar contra los acusados, mientras que la defensa solo pudo entrar a dos", explicó Miranda.
La joven sostiene que el proceso de apelación fue “arbitrario y amañado” y reconoce que el abogado de ellos les hizo una buena defensa.
Según la opositora, el letrado insistió durante sus alegatos en que “era una injusticia contra nosotros, que en Cuba sí hay presos políticos y que nuestro juicio era netamente político”, aseguró.
Relató que el "fiscal Fernando" les hizo un acto de repudio, y le "manoteó en la cara" a su hermana Adairis. "El vociferó que mi hermana estaba usando a los niños para hacer política”, precisó Miranda.
Deni Pino Basulto, opositor residente en Holguín, el único activista que pudo entrar al juicio, reconoció que el área estuvo militarizada todo el tiempo, y que los oficiales de la seguridad del estado usaron insultos y groserías conta las jóvenes cuando terminó el proceso.
Maidolis Leiva no apeló la sanción de privación de libertad domiciliaria, ni asistió a la apelación de los hijos porque se quedó en casa al tanto de los nietos.
A Maidolis Leyva, contra quien pesaba igual acusación, le impusieron un año de restricción de libertad que cumplirá en la casa, y según ha dicho se encargará de los niños durante el tiempo que dure la sanción de las mellizas.
Los disidentes salieron a la calle el 27 de noviembre de 2016, luego de que el gobierno impusiera un toque de queda por la muerte de Fidel Castro. Por esa razón sufrieron un acto de repudio, la casa fue vandalizada y todos fueron conducidos a la Unidad de Operaciones de Seguridad del Estado en Holguín.
Los tres hermanos permanecieron detenidos por 46 días hasta la celebración del juicio.
Desde el momento de la detención, la familia ha sostenido su inocencia ante las acusaciones, y considera que lo ocurrido contra ellos es una represalia del gobierno contra todo el que tenga el valor de disentir del régimen.
En noviembre del pasado año, organizaciones opositoras en la isla denunciaron arbitrariedades, detenciones y maltratos a opositores durante los nueve días de duelo impuestos en Cuba por la muerte del exgobernante Fidel Castro.
Desde esa fecha, aún permanece en prisión y a espera de juicio el médico opositor Eduardo Cardet, coordinador del Movimiento Cristiano Liberación (MCL) residente en Velasco, también en la provincia de Holguín.