Como se determinó en un acuerdo migratorio suscrito la semana pasada en La Habana en ocasión de la visita del presidente Juan Carlos Varela, desde ayer los cubanos que viajen a Panamá solo requerirán para ingresar al país istmeño una visa estampada por el cónsul en La Habana.
La nueva norma, que sustituye a la visa restringida para agilizar los trámites de visado, fue establecida luego de una "evaluación" del Gobierno, según indica el Decreto Ejecutivo 509 publicado el lunes en la Gaceta Oficial de Panamá y firmado por el presidente Varela.
En el decreto se establece que en cada oficina consular habrá un funcionario del Servicio Nacional de Migración (SNM) y del Consejo de Seguridad Nacional (CSN), para que desde los consulados hagan la verificación de los requisitos migratorios y de los antecedentes de seguridad de cada solicitante.
Con el cambio, ya no será el CSN el encargado de autorizar los permisos en la forma de visas restringidas, al pasar la competencia para otorgarlos a los consulados.
La visa estampada costará un máximo de $50 y permitirá a los cubanos la entrada y salida múltiple de Panamá por hasta tres años.
En La Habana, la estatal Agencia de Información Nacional informó la semana pasada que el convenio migratorio firmado por ambos países permitirá, además, el intercambio de información de seguridad para la prevención de la migración irregular, el tráfico ilícito y la trata de personas.
Cuba figuraba junto a un reducido grupo de países como China, Indonesia, Pakistán, India y algunos de África a los que Panamá aplicaba el procedimiento de visa restringida, a determinar por el CSN. Entre las funciones de ese organismo están proteger la integridad nacional e internacional del Estado y detectar y prevenir actos que atenten contra la seguridad nacional.