Aunque amanecieron con un día soleado, los avileños se preparan ante la amenaza del huracán Irma para la costa norte de Cuba, que según los pronósticos podría estar afectando desde este viernes la región oriental y central de la isla, mientras que en Guantánamo los temores de la población son mayores en la medida que avanza el día.
Yaremis Herrera, residente en la ciudad de Baracoa, dijo que por su barrio muchas personas empezaron a cerrar bien sus casas para la evacuación.
“Nosotros vamos para una escuela que designaron para los evacuados, pero también los vecinos se ayudan entre ellos, precisó la mujer.
Este jueves han vendido galletas y pollo a la población “pero se acabó enseguida”, precisó la mujer, que aún recuerda lo que enfrentaron en octubre pasado, cuando el huracán Matthew azotó por la región, y “aún hay personas que tienen serias afectaciones en sus casas”.
Más al centro de Cuba, en la provincia de Ciego de Ávila, las condiciones del tiempo se comportan estables y la gente sigue la vida normal.
La señora Coralia Abreu, residente en la ciudad de Ciego de Ávila, dijo que “todo está soleado” y la gente hoy se fue para el trabajo.
“Solo queda esperar para ver cómo se comporta el tiempo en la próximas horas”, dijo la mujer, que sugiere comenzar con el acopio de agua y alimentos y estar al tanto de los noticieros a partir del mediodía para saber con exactitud lo que pueda ocurrir.
En la localidad de Manatí, en la provincia de Ciego de Ávila, la gente se prepara “con lo poco que tienen”, dijo Eduardo Rodríguez, quien comenzó a preparar condiciones.
“Estamos asegurando alimentos, limpiando los patios y asegurando la casa”, explicó el hombre que hasta ahora se ha mantenido informado con los medios de prensa.
En las áreas turísticas situadas en el cayerío norte de Ciego de Ávila y Villa Clara comenzó la evacuación de los turistas, según informó la prensa oficial.
La economista cubana Martha Beatriz Roque precisó que los vientos y la lluvia en la región golpearán con fuerza al sector estatal, único dueño de los emporios turísticos.
Aunque el gobierno habló de las medidas de seguridad que han tomado con turistas, es innegable que habrá serias afectaciones “ahora y después”.
Las pérdidas serán numerosas, y el gobierno no tiene reservas monetarias para responder ante un impacto tan fuerte, en un país donde “en estos momentos no hay ni que comer, y miles de familias viven en casas en muy mal estado”, recordó Roque.
(Con reporte de Ivette Pacheco)
