Dos organizaciones representativas dentro de la oposición en Cuba abandonaron la membresía de la Mesa de Unidad para la Acción Democrática (MUAD) durante la pasada semana, según dieron a conocer ambas concertaciones en sus respectivas páginas web.
La Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) publicó el martes la decisión de abandonar la concertación opositora mientras que el jueves lo hizo el Frente Anti Totalitario Unido (FANTU).
En declaraciones a Martí Noticias, Guillermo Fariñas, coordinador general del FANTU, expresó que "la razón fundamental para la separación" es el rechazo de muchas de las organizaciones que integran la MUAD a realizar acciones cívicas no violentas en las calles.
Manuel Cuesta Morúa, presidente actual de la MUAD, rechazó las imputaciones expresadas por el FANTU, y dijo a Martí Noticias que en la MUAD "hay una diversidad de organizaciones que cubren todo el arco político” y “no hay ninguna negación a las acciones no violentas en las calles”.
Cuesta Morúa dijo a 14ymedio que la salida de esas organizaciones "es un golpe" para el proyecto, porque ambos grupos "han trabajado duro y son muy prestigiosos dentro de Cuba". Sin embargo, quitó gravedad al rompimiento, al que catalogó como "una crisis de crecimiento" que "no va a terminar" con la concertación.
La campaña de la MUAD se presentó en agosto de 2015 en La Habana, y es una iniciativa que busca impulsar el movimiento ciudadano para encaminar una transición democrática en el nuevo contexto político de deshielo con Estados Unidos, y una campaña para llamar a elecciones después que Raúl Castro deje el poder.
Manuel Cuesta Morúa, de Arco Progresista, quien había tenido antes la oportunidad de reunirse con el presidente estadounidense Barack Obama en el "Foro de la sociedad civil" en Panamá, dijo que la MUAD quiere "superar el debate" sobre la nueva relación de Cuba con Estados Unidos y la Unión Europea, para "asumir esa nueva realidad y trabajar en ella, para potenciar un cambio hacia una democracia participativa y ciudadana".
