En el aniversario 10 de la Primavera Negra de Cuba, Amnistía Internacional denunció que aunque los 75 opositores e intelectuales arrestados el 18 de marzo del 2003 han sido puestos en libertad extrapenal u obligados a salir del país, la situación de los derechos humanos en Cuba no ha cambiado.
En un comunicado, la organización civilista con sede en Londres, recordó que las 75 personas detenidas en esa ola represiva eran prisioneros de conciencia, puestos tras las rejas por ejercer pacíficamente su derecho a la libertad de expresión.
Amnistía precisa que la mayoría de los 75 fueron obligados a exiliarse en España, y que los que permanecieron en Cuba aún son presionados ya que su libertad es condicional.
La organización asevera que aunque han pasado 10 años, las autoridades comunistas continúan su política de acosar, intimidar, detener y limitar el movimiento de los disidentes.
Agrega Amnistía Internacional que a pesar de la reforma migratoria, el gobierno de Cuba mantiene vigente una gran variedad de leyes que impiden a los opositores y defensores de los derechos humanos ejercer sus derechos de expresión, asociación y asamblea.
RECORDANDO LA PRIMAVERA NEGRA
A propósito del aniversario de la Primavera Negra, AI, publicó en su página digital, publicó un recordatorio de la ola represiva y de los arrestados y condenados entonces, como José Daniel Ferrer y Pablo Pacheco.
Ferrer García, Coordinador de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), organización no reconocida, que busca el cambio democrático por medios no violentos y el activista “ha sido detenido en numerosas ocasiones como castigo por su labor” y declaró que “apenas puede recordar un momento en que las autoridades no estén monitoreando y bloqueando sus movimientos y llamadas telefónicas”.
Ferrer explica que los años noventa era detenido arbitrariamente en forma regular durante cortos períodos y era constantemente amenazado con la cárcel. Por lo que cuando el 15 de marzo de 2003 dos oficiales de la Seguridad del Estado le advirtieron que dejara sus actividades opositoras “o que se enfrentaría un largo tiempo en prisión”, “su reacción fue reírse”, pues había recibido muchas veces amenazas de prisión.
El 18 de marzo de 2003 fue arrestado como parte del grupo de 75 disidentes y opositores políticos en una campaña sin precedentes contra el movimiento disidente en la isla, recuerda Amnistía Internacional.
José Daniel fue sentenciado a 25 años bajo cargos de "actos contra la independencia o la integridad territorial del Estado", aunque la fiscalía insistió en la pena de muerte, la pena máxima por ese "delito.
En julio de 2010, tras la intervención de la Iglesia Católica de Cuba, las autoridades de Cuba accedieron a liberar a todas las personas de los 75 que quedaban en prisión, entre ellos, José Daniel Ferrer García.
Los disidentes políticos fueron puestos en libertad bajo "licencia extrapenal", una libertad condicional significa que los cargos contra ellos no han sido retirados. La mayoría de los opositores se vieron obligados a exiliarse en España.
José Daniel se negó a salir de Cuba y finalmente salió de prisión en marzo de 2011. Desde entonces, afirma, “no ha dejado de sufrir acoso - sobre todo en forma de detenciones breves dirigidas a que le impida el desempeño de su activismo, incluyendo la asistencia a reuniones privadas y eventos públicos. Su casa ha sido allanada por las fuerzas de seguridad del Estado y confiscaron su ordenador”.
En agosto de 2012, fue detenido durante 36 horas en la provincia de Holguín, antes de ser liberado sin cargos. En abril de 2012, fue arrestado durante 27 días por "desorden público" en Santiago de Cuba y fue liberado con la condición de que renunciara a su activismo político, algo que a lo que se negó. Dos meses antes, había sido detenido en La Habana y estuvo incomunicado durante tres días.
"El catálogo de la represión y el acoso sufrido por José Daniel Ferrer García desde su liberación ilustra la actual estrategia de las autoridades cubanas en las que los activistas están detenidos por cortos períodos de tiempo para desalentar parte de la situación de los derechos humanos en el país" explicó Javier Zúñiga, asesor especial de Amnistía Internacional.
Según la Comisión Cubana de Derechos Humanos hubo al menos 504 detenciones arbitrarias en febrero del 2013, mientras que la agencia de noticias Hablemos Press ha informado de 40 periodistas independientes y blogueros detenidos arbitrariamente en lo que va de año.
Una nueva ley que entró en vigor en enero, ha eliminado la necesidad de los cubanos a tener un permiso para viajar al extranjero, lo que hace que sea más fácil para los cubanos salir de la isla y los cubanos que viven en el extranjero a regresar. Cuando se enteró del levantamiento de la prohibición de viajes a Cuba, José Daniel supo que el cambio histórico no habría mucha diferencia para él. El hecho de que él todavía está cumpliendo su condena significa que no puede solicitar un pasaporte hasta que termine su pena en 2028.
Amnistía Internacional afirma que José Daniel y sus compañeros activistas fueron condenados únicamente por expresar de manera pacífica sus opiniones, por tanto, sus sentencias deben ser anuladas inmediatamente.
El periodista Pablo Pacheco, fue originalmente sentenciado a 20 años de prisión en virtud de una ley que prohíbe la transmisión de información a los Estados Unidos que podrían ser utilizados para reforzar medidas anticubanas, y fue liberado en julio de 2010, bajo la condición de que él y su familia se trasladaron a España.
Pacheco recuerda que las condiciones de reclusión eran terribles - celdas de aislamiento sin luz solar y un aseo en la misma celda, que perdió 30 libras y sufrió daños a largo plazo en sus rodillas. "A mi familia sólo se le permitió visitarme una vez cada tres meses ", dijo a Amnistía Internacional.
Pablo todavía puede recordar vívidamente el último día que pasó en Cuba.
Fue trasladado directamente desde la cárcel hasta el aeropuerto, donde se encontró a su esposa e hijo. Pasó casi dos años en España y luego se trasladó a Miami, porque la crisis económica en el país europeo dejó pocas oportunidades de trabajo para él y su esposa.
Pablo dijo a Amnistía Internacional que quiere regresar a Cuba, donde está su familia y amigos pero que no va a estar listo para regresar hasta que el país se convierta en una verdadera democracia.
Actualmente Amnistía Internacional ha nombrado a dos activistas cubanos encarcelados como "presos de conciencia".
El periodista Calixto Martínez Arias, miembro fundador de Hablemos Press, detenido el 16 de septiembre 2012 cerca de aeropuerto de La Habana por la policía.
Cuando se quejó en la estación de policía por su detención, fue golpeado y rociado con gas pimienta, y luego gritó: "¡Abajo Raúl!", ¡Abajo Fidel!" por lo que fue acusado de "falta de respeto" a Raúl Castro y Fidel Castro.
Calixto aún no ha sido formalmente acusado por las autoridades cubanas, e inició una huelga de hambre el pasado 6 de marzo de 2013 en protesta por su prolongada detención.
Marcos Lima Maiquel Cruz se encuentra cumpliendo una condena de tres años de haber sido detenido el 25 de diciembre de 2010 en su casa en Holguín por reproducir canciones criticas con el gobierno. Fue condenado por "insultar los símbolos de la patria" y "desorden público".
Para José Daniel, los 10 años que siguieron a la Primavera Negra no han traído ninguna mejoría en la situación de los derechos humanos en Cuba. La facilidad en las restricciones de viaje son "sólo una cortina de humo pues es el gobierno cubano quien decide qlos que pueden y no pueden salir de la isla. Al mismo tiempo otras libertades fundamentales están siendo reprimidas y en aumento.
"La sociedad civil en Cuba ya ha perdido el miedo a hablar", dijo Pablo Pacheco, "y el mundo debe apoyar sus esfuerzos".
En Cuba la Dama de Blanco Alejandrina García, el expreso político del Grupo de los 75 José Daniel Ferrer y la activista de Derechos Humanos Yanelis Rodríguez, recuerdan la fecha.
En un comunicado, la organización civilista con sede en Londres, recordó que las 75 personas detenidas en esa ola represiva eran prisioneros de conciencia, puestos tras las rejas por ejercer pacíficamente su derecho a la libertad de expresión.
Amnistía precisa que la mayoría de los 75 fueron obligados a exiliarse en España, y que los que permanecieron en Cuba aún son presionados ya que su libertad es condicional.
La organización asevera que aunque han pasado 10 años, las autoridades comunistas continúan su política de acosar, intimidar, detener y limitar el movimiento de los disidentes.
Agrega Amnistía Internacional que a pesar de la reforma migratoria, el gobierno de Cuba mantiene vigente una gran variedad de leyes que impiden a los opositores y defensores de los derechos humanos ejercer sus derechos de expresión, asociación y asamblea.
RECORDANDO LA PRIMAVERA NEGRA
A propósito del aniversario de la Primavera Negra, AI, publicó en su página digital, publicó un recordatorio de la ola represiva y de los arrestados y condenados entonces, como José Daniel Ferrer y Pablo Pacheco.
Ferrer García, Coordinador de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), organización no reconocida, que busca el cambio democrático por medios no violentos y el activista “ha sido detenido en numerosas ocasiones como castigo por su labor” y declaró que “apenas puede recordar un momento en que las autoridades no estén monitoreando y bloqueando sus movimientos y llamadas telefónicas”.
Ferrer explica que los años noventa era detenido arbitrariamente en forma regular durante cortos períodos y era constantemente amenazado con la cárcel. Por lo que cuando el 15 de marzo de 2003 dos oficiales de la Seguridad del Estado le advirtieron que dejara sus actividades opositoras “o que se enfrentaría un largo tiempo en prisión”, “su reacción fue reírse”, pues había recibido muchas veces amenazas de prisión.
El 18 de marzo de 2003 fue arrestado como parte del grupo de 75 disidentes y opositores políticos en una campaña sin precedentes contra el movimiento disidente en la isla, recuerda Amnistía Internacional.
José Daniel fue sentenciado a 25 años bajo cargos de "actos contra la independencia o la integridad territorial del Estado", aunque la fiscalía insistió en la pena de muerte, la pena máxima por ese "delito.
En julio de 2010, tras la intervención de la Iglesia Católica de Cuba, las autoridades de Cuba accedieron a liberar a todas las personas de los 75 que quedaban en prisión, entre ellos, José Daniel Ferrer García.
Los disidentes políticos fueron puestos en libertad bajo "licencia extrapenal", una libertad condicional significa que los cargos contra ellos no han sido retirados. La mayoría de los opositores se vieron obligados a exiliarse en España.
José Daniel se negó a salir de Cuba y finalmente salió de prisión en marzo de 2011. Desde entonces, afirma, “no ha dejado de sufrir acoso - sobre todo en forma de detenciones breves dirigidas a que le impida el desempeño de su activismo, incluyendo la asistencia a reuniones privadas y eventos públicos. Su casa ha sido allanada por las fuerzas de seguridad del Estado y confiscaron su ordenador”.
En agosto de 2012, fue detenido durante 36 horas en la provincia de Holguín, antes de ser liberado sin cargos. En abril de 2012, fue arrestado durante 27 días por "desorden público" en Santiago de Cuba y fue liberado con la condición de que renunciara a su activismo político, algo que a lo que se negó. Dos meses antes, había sido detenido en La Habana y estuvo incomunicado durante tres días.
"El catálogo de la represión y el acoso sufrido por José Daniel Ferrer García desde su liberación ilustra la actual estrategia de las autoridades cubanas en las que los activistas están detenidos por cortos períodos de tiempo para desalentar parte de la situación de los derechos humanos en el país" explicó Javier Zúñiga, asesor especial de Amnistía Internacional.
Según la Comisión Cubana de Derechos Humanos hubo al menos 504 detenciones arbitrarias en febrero del 2013, mientras que la agencia de noticias Hablemos Press ha informado de 40 periodistas independientes y blogueros detenidos arbitrariamente en lo que va de año.
Una nueva ley que entró en vigor en enero, ha eliminado la necesidad de los cubanos a tener un permiso para viajar al extranjero, lo que hace que sea más fácil para los cubanos salir de la isla y los cubanos que viven en el extranjero a regresar. Cuando se enteró del levantamiento de la prohibición de viajes a Cuba, José Daniel supo que el cambio histórico no habría mucha diferencia para él. El hecho de que él todavía está cumpliendo su condena significa que no puede solicitar un pasaporte hasta que termine su pena en 2028.
Amnistía Internacional afirma que José Daniel y sus compañeros activistas fueron condenados únicamente por expresar de manera pacífica sus opiniones, por tanto, sus sentencias deben ser anuladas inmediatamente.
El periodista Pablo Pacheco, fue originalmente sentenciado a 20 años de prisión en virtud de una ley que prohíbe la transmisión de información a los Estados Unidos que podrían ser utilizados para reforzar medidas anticubanas, y fue liberado en julio de 2010, bajo la condición de que él y su familia se trasladaron a España.
Pacheco recuerda que las condiciones de reclusión eran terribles - celdas de aislamiento sin luz solar y un aseo en la misma celda, que perdió 30 libras y sufrió daños a largo plazo en sus rodillas. "A mi familia sólo se le permitió visitarme una vez cada tres meses ", dijo a Amnistía Internacional.
Pablo todavía puede recordar vívidamente el último día que pasó en Cuba.
Fue trasladado directamente desde la cárcel hasta el aeropuerto, donde se encontró a su esposa e hijo. Pasó casi dos años en España y luego se trasladó a Miami, porque la crisis económica en el país europeo dejó pocas oportunidades de trabajo para él y su esposa.
Pablo dijo a Amnistía Internacional que quiere regresar a Cuba, donde está su familia y amigos pero que no va a estar listo para regresar hasta que el país se convierta en una verdadera democracia.
Actualmente Amnistía Internacional ha nombrado a dos activistas cubanos encarcelados como "presos de conciencia".
El periodista Calixto Martínez Arias, miembro fundador de Hablemos Press, detenido el 16 de septiembre 2012 cerca de aeropuerto de La Habana por la policía.
Cuando se quejó en la estación de policía por su detención, fue golpeado y rociado con gas pimienta, y luego gritó: "¡Abajo Raúl!", ¡Abajo Fidel!" por lo que fue acusado de "falta de respeto" a Raúl Castro y Fidel Castro.
Calixto aún no ha sido formalmente acusado por las autoridades cubanas, e inició una huelga de hambre el pasado 6 de marzo de 2013 en protesta por su prolongada detención.
Marcos Lima Maiquel Cruz se encuentra cumpliendo una condena de tres años de haber sido detenido el 25 de diciembre de 2010 en su casa en Holguín por reproducir canciones criticas con el gobierno. Fue condenado por "insultar los símbolos de la patria" y "desorden público".
Para José Daniel, los 10 años que siguieron a la Primavera Negra no han traído ninguna mejoría en la situación de los derechos humanos en Cuba. La facilidad en las restricciones de viaje son "sólo una cortina de humo pues es el gobierno cubano quien decide qlos que pueden y no pueden salir de la isla. Al mismo tiempo otras libertades fundamentales están siendo reprimidas y en aumento.
"La sociedad civil en Cuba ya ha perdido el miedo a hablar", dijo Pablo Pacheco, "y el mundo debe apoyar sus esfuerzos".
En Cuba la Dama de Blanco Alejandrina García, el expreso político del Grupo de los 75 José Daniel Ferrer y la activista de Derechos Humanos Yanelis Rodríguez, recuerdan la fecha.