Líderes y activistas exiliados mostraron opiniones matizadas sobre las alusiones a Cuba en el Informe Mundial de Derechos Humanos de la Unión Europea.
"Es un informe importante porque señala las violaciones a los derechos civiles y políticos, pero también menciona el deterioro de importantes derechos sociales, como la educación y la salud", afirmó Yaxys Cires, director de Estrategia del Observatorio Cubano de Derechos Humanos.
El reporte de la diplomacia europea recoge que "las libertades de expresión, asociación y reunión siguieron estando sujetas a importantes restricciones en Cuba en 2020" y constató que "la oposición política organizada sigue siendo ilegal".
No obstante, según Cires, "el reto está en cómo incorporar dichas exigencias a las relaciones" entre Bruselas y La Habana.
"Ahí juega un papel muy importante revisar aquellas cuestiones que hay que cambiar del acuerdo bilateral, para que sea más efectivo", consideró.
La UE recogió en su reporte que "la libertad de prensa siguió siendo motivo de preocupación. Además de señalar las "amenazas de enjuiciamiento, bajo cargos de 'desacato' y 'propagación de epidemia'", utilizadas por el gobierno cubano para "restringir" la actividad de los ciudadanos en redes sociales y medios de comunicación, mientras que "varios periodistas y blogueros fueron multados, en virtud del Decreto 370".
En opinión de Norges Rodríguez, director del sitio digital Yucabyte, es importante que el informe de la Unión haya recogido algunos de los problemas del Decreto-Ley 370, pero lo considera insuficiente.
"Para lo que ha sucedido en Cuba en los últimos meses en Cuba, relacionado con la censura en internet, realmente el informe se queda corto", indica el activista.
Por su parte, Léo Juvier-Hendrickx, de la asociación Cubanos Libres de Bélgica, pidió mayor contundencia a la Unión Europea en la parte referida a los derechos del niño.
"Sabemos que en Cuba los niños son adoctrinados, y esa es la violencia más grande que puede tener un Estado contra sus niños", explicó.
El informe europeo manifiesta que "Cuba ha apoyado la lucha contra la discriminación basada en la orientación sexual y la identidad de género, así como los derechos económicos, sociales y culturales y los derechos del niño".