A pesar de años de educación y propaganda atea, los cristianos cubanos han conservado sus creencias afirmó Gustavo Andújar, director de la revista Espacio Laical, de la Arquidiócesis de La Habana, durante una entrevista concedida a la revista española Religión Confidencial.
“Los cristianos cubanos hemos resistido a la propaganda atea por nuestra coherencia de vida y servicio a los demás”, explicó Andújar quien también dirige el Centro Cultural Padre Félix Varela, en La Habana. “Los años de educación y propaganda atea ya pasaron, gracias a Dios, en nuestro país. A pesar de esta presión, Cuba es un país mayoritariamente creyente.”
Andújar, quien asistió como ponente al Congreso Católicos y Vida Pública, celebrado esta semana en Madrid, afirmó que “en contraste con la caricatura que se presentaba de los cristianos (personas alienadas por la religión, opio del pueblo, siempre al servicio de las clases explotadoras), la gente veía en nosotros, mayoritariamente, a personas amables y serviciales, responsables y honestos, con defectos, por supuesto, perodispuestos a ayudar al necesitado”.
“Éramos así precisamente porque somos cristianos, no a pesar de ser cristianos como decían a veces los dirigentes, subrayó.
Andújar destacó que esa actitud cristiana no implica “soportar calladamente abusos”, y “medidas discriminatorias que pretendan imponerse”, las cuales hay que rechazar “ya sea legalmente o en los medios, pero siempre habrá que tener en cuenta que será nuestra ejecutoria personal y comunitaria la que refrendará la justicia de nuestro reclamo”.
Para Andújar uno de los retos de los católicos cubanos es ofrecer espacios de expresión plural y diversa, en una sociedad en la que dichos encuentros son casi inexistentes.
“Por ejemplo, la revista ´Espacio Laical´ que dirijo, tiene una sección llamada ´En Diálogo´, que se elabora a partir de uno de esos espacios de debate. Seleccionamos un tema e invitamos a varios ponentes de reconocida competencia a presentarlo en sus diversas facetas. Se abre la discusión, que solo tiene como límite el respeto al otro. Todo se graba, y sin censura de ningún tipo, se publica en la revista”, explicó.
Al referirse a la religiosidad popular, Andújar señaló que probablemente, hasta un 90 por ciento de los cubanos tiene algún tipo de creencia, y esa religiosidad tiene en gran parte raíces católicas.
“La Iglesia católica es ciertamente respetada por el pueblo, no solo sus templos, sino también su clero y especialmente las religiosas, que tienen un gran reconocimiento social por su labor abnegada al servicio de los enfermos, los ancianos y los más necesitados”, aseguró.
En cuanto a los cultos sincréticos de diversos tipos como la santería, que están proliferando en Cuba, indicó que, “siempre gozaron de una cierta promoción oficial, en la que se presentan curiosamente, y a pesar de su evidente matriz africana, como una religión verdaderamente cubana en contraposición, sin que se diga como tal, al cristianismo “importado” y “colonial”.
Añadió que, a diferencia de lo que ocurre en otros países latinoamericanos, en Cuba no hay una “acometida masiva” de sectas religiosas, “pero sí hay algunos grupos, promocionados sobre todo desde Estados Unidos, que logran avances ocasionales, sin que hasta ahora parezcan lograr un crecimiento estable”.
Andújar opinó que a pesar de las campañas públicas que se promocionan desde el Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX) a favor del matrimonio entre personas del mismo sexo, esa tendencia internacional no existe en la isla.
“El avance legislativo en este campo se está frenando porque existe un rechazo popular a algunas de sus propuestas, como el llamado matrimonio homosexual”, afirmó.
En ese sentido criticó al cine cubano actual porque, según dijo, “refleja una presencia desproporcionada a los temas relativos a conflictos de identidad sexual”
“Por supuesto que se trata de seres humanos que confrontan situaciones difíciles, pero cuando uno mira la realidad cubana encuentra otros conflictos igualmente serios, que afectan a una proporción muchísimo mayor de la población, y no se abordan ni remotamente con similar frecuencia”, aseguró.
Además de sus responsabilidades en la Arquidiócesis habanera, Andújar es presidente de la Asociación Católica Mundial por la Comunicación (SIGNIS), que prepara su póximo Congreso Mundial 2017, que se celebrará en junio en la ciudad de Quebec, Canadá, con el lema “Promoviendo historias de esperanzas”.
Uno de los objetivos de Signis es promover una cultura de paz a través de los medios de comunicación, algo que en ocasiones no es fácil, puesto que los periodistas, además de informar, buscan el impacto y a veces, conlleva a la polémica.
“El debate y la polémica no deben considerarse contrapuestos a una cultura de paz. No hay que confundir la paz con una situación de inmovilismo e inmutabilidad, ajena a las contradicciones y conflictos que son tan consustanciales a la convivencia humana y que pueden constituir, cuando se resuelven constructivamente, jalones eficaces hacia el progreso. La solución del conflicto no está en la derrota de un adversario, sino en la capacidad para construir consensos a través del diálogo y la negociación, para salir del propio atrincheramiento, ir al encuentro del otro y avanzar juntos en busca de soluciones”, explicó.