La primera noche del segundo debate de los precandidatos demócratas a la presidencia de Estados Unidos tuvo lugar este martes en la ciudad de Detroit, con el auspicio de la cadena CNN y el tema de los seguros médicos como primer protagonista.
El primero en entrar al Teatro Fox fue el senador de Vermont Bernie Sanders, el que mejores resultados de sondeos acumula entre los presentes, seguido por la senadora de Massachusetts Elizabeth Warren.
Luego lo hicieron el alcalde de South Bend, en Indiana, Pete Buttigieg; el ex congresista de Texas Beto O’Rourke; la senadora de Minnesota Amy Klobuchar; el ex gobernador de Colorado John Hickenlooper; el congresista de Ohio Tim Ryan; el ex congresista de Maryland John Delaney; la autora Mariam Williamson y el gobernador de Montana Steve Bullock.
Considerando el lugar que les concede el Comité Nacional Demócrata según las encuestas, fue precisamente Bullock el primero en hacer sus palabras de presentación, y en orden ascendente le siguieron los demás precandidatos.
La primera pregunta de los moderadores, en este caso del presentador de CNN Jake Tapper, fue para el senador Sanders. Quiso saber cómo sustentaba su idea de un seguro médico gratis, o Medicare para todos, si eso representaba un aumento de impuestos para la clase media.
Sanders puso el ejemplo de cómo el gobierno de Canadá les ha asegurado cobertura médica a todos los canadienses, y luego Tapper hizo a la senadora Warren, al ex congresista O’Rourke y a otros contendientes la pregunta de si estaban dispuestos a aumentar los impuestos a la clase media para cubrir los costos de un seguro médico universal.
Sanders dijo que la duda del moderador Tapper era un tema recurrente de los republicanos, y que ese fragmento del debate serviría para hacer anuncios comerciales contra ellos.
Buttigieg intervino para pedir que todos dejaran de preocuparse por lo que dijeran los republicanos, porque de una forma u otra dirían que ellos no son más que unos socialistas trasnochados.
Muchos hospitales de Estados Unidos cerrarían si se aplicara el seguro médico universal, dijo el empresario Delaney. También dio su apoyo a un aumento de los impuestos sobre los ingresos que provienen de inversiones pasivas.
La moderadora Dana Bash introdujo el tema de los cruces ilegales por la frontera con México. A la pregunta de si estaban dispuestos a quitarle la condición de delitos a esas incursiones, Warren y Sanders dijeron que sí, Buttigieg manifestó que solo en los casos donde no se hubiera cometido fraude, Bullock opinó que hacerlo atraería más indocumentados, y O'Rourke aseguró que una reforma migratoria integral reduciría esas incursiones, pero que quienes las hicieran aun entonces deberían ser procesados.
El moderador Don Lemon preguntó luego qué harían específicamente para eliminar lo que calificó de epidemia de violencia con armas de fuego.
En última instancia, declaró la senadora Klobuchar, todo tiene que ver con la Asociación Nacional del Rifle (NRA) y pidió poner en vigor revisiones de antecedentes penales para todos los que quieran comprar armas, además de otros mecanismos de control.
"Es la misma conversación desde que yo estaba en el preuniversitario", intervino el alcalde Buttigieg. Algo anda mal, porque sabemos lo que tenemos que hacer y no lo hacemos, añadió. Nadie tiene una solución perfecta para el problema de la violencia con armas, agregó el senador Sanders, y subrayó que desea eliminar la venta de armas de asalto.
Hickenlooper manifestó que las ideas socialistas solo servirían para regalarle las elecciones al Presidente Trump, culpable –opinó-- de lo que en medicina y derecho se conoce como negligencia (malpractice). Sanders reaccionó con una frase: lo que sé es que estoy por encima de Trump en las encuestas, incluso en estados clave.
Delaney llamó la atención de que los demócratas triunfan cuando hacen campaña proponiendo soluciones concretas, no cuentos de hadas. Las ideas de Sanders y Warren están descartadas desde el principio, dijo, y Warren manifestó no entender cómo se puede aspirar a la presidencia diciendo solo lo que no se debe hacer.
Interrogado sobre el plan de Sanders para eliminar antes de 2040 los autos movidos por gasolina, Ryan aseguró que era necesario crear incentivos para que nuevas tecnologías dieran las soluciones al problema de los combustibles y habló de cómo era necesario trabajar juntos en ese sentido.
Sanders fue enfático en su plan de acabar con la industria de los combustibles fósiles, y Ryan le dijo: “No tienes que gritar”, hay que trabajar juntos.
Debemos llamar a los supremacistas blancos por lo que son: terroristas, manifestó la senadora Warren al ser interrogada sobre el tema de las divisiones raciales. "Tengo un plan de educación universitaria gratis para todos", dijo, y "otras políticas que ayuden a cerrar la brecha que separa a los blancos de los negros".
En otro momento, O’Rourke dijo que cuando es necesario “cruzar las líneas partidistas”, él está dispuesto a trabajar incluso con el Presidente Trump.
Sobre el tema de evitar otro problema con el agua potable como el que tuvo el poblado de Flint, en Michigan, Williamson aseguró que hay que pensar en las comunidades que, como los afroamericanos, “no tienen recursos para pelear”.
Nadie puede justificar lo que está haciendo este presidente, declaró la senadora Klobuchar al ser interrogada sobre los partidarios de Trump que ponen la economía por encima de las acusaciones de fanatismo.
Dos siglos y medio de esclavismo y largos años de intolerancia han creado las condiciones para que sea necesario pagar “reparación” de daños a la comunidad afroamericana, aseguró Williamson. La inversión para hacerlo debería ser de billones de dólares, más de los miles de millones que se están considerando, dijo.
Ryan defendió las represalias del Presidente Trump contra China, y también lo defendió el ex congresista Delaney. “Necesitábamos hacer algo”, opinó Ryan ante la pregunta de si continuaría aplicando las tarifas arancelarias. China domina el 60 por ciento del mercado de los paneles solares, advirtió al referirse a la competencia que Estados Unidos debe acometer en ese campo.
Bullock, gobernador de Montana, dijo que las tarifas no son la solución para obtener buenos acuerdos que beneficien a los granjeros y a la manufactura en Estados Unidos.
Ryan y Klobuchar no ven con buenos ojos las reuniones del Presidente Trump con el dictador norcoreano Kim Jong Un, que ella puso en un plano semejante a los encuentros "cordiales" con el presidente ruso Vladimir Putin. “Deberíamos concentrarnos en ir a países de Centroamérica como Nicaragua para resolver en su origen el problema que enfrentamos en la frontera”, añadió Ryan.
La senadora Warren y el gobernador Bullock tuvieron una controversia sobre la pertinencia de una política de compromiso en Estados Unidos de no ser el primero en usar armas nucleares. Para ella, es necesario crear confianza en todo el mundo. Para Bullock, con tantos gobernantes interesados en usar las armas nucleares como instrumentos de poder, no es conveniente comprometerse a esperar que otros las usen primero.
La noche del miércoles toca el turno en otra sesión de este segundo debate de los precandidatos demócratas a Michael Bennet, Kirsten Gillibrand, Julián Castro, Cory Booker, Joe Biden, Kamala Harris, Andrew Yang, Tulsi Gabbard, Jay Inslee y Bill de Blasio.