El presidente electo de Chile, Gabriel Boric, inició el domingo su discurso de victoria electoral en lengua indígena mapuche ante miles de simpatizantes, en su mayoría jóvenes, afirmando que una nueva generación exige que los derechos sean iguales para todos.
Boric, de 35 años de edad, representante del pacto Apruebo Dignidad, formado por el Partido Comunista y el izquierdista Frente Amplio, ganó la segunda vuelta de elecciones presidenciales sobre el candidato ultraderechista José Antonio Kast con el 56% de los votos.
En la primera ronda el mes pasado, Kast, conocido por defender la dictadura militar de Chile, terminó dos puntos por delante de Boric, pero no logró convencer al electorado de que la agenda izquierdista de su rival cambiaría la economía más estable y avanzada de América Latina.
En su discurso, Boric reiteró sus promesas de luchar contra el cambio climático bloqueando un proyecto minero y poner fin al sistema privado de pensiones, una herencia del modelo económico neoliberal impuesto por el dictador Augusto Pinochet.
Sin embargo, cuando asuma la presidencia el próximo 11 de marzo, el nuevo presidente recibirá un Parlamento dividido y una economía que lucha para recuperarse de la pandemia del coronavirus.
En una señal de civilidad democrática, Kast admitió de inmediato la derrota en un mensaje de Twitter y después acudió a la sede de campaña de Boric para reunirse con su rival.
El presidente saliente, Sebastián Piñera, se dirigió al país tras conocerse los resultados. "Hoy las chilenas y chilenos hemos elegido un nuevo presidente que asumirá el mando de la nación el próximo 11 de marzo. Quiero empezar por felicitar a Gabriel Boric por su triunfo y desearle el mayor de los éxitos".
La ventaja de Boric es superior a la esperada en unos comicios polarizados, que siguen a las protestas sociales que llevaron a la redacción de una nueva Constitución. Boric, a diferencia de Kast, ha respaldado el trabajo de la Convención Constituyente.
Ambos defendieron durante sus campañas ideas contrapuestas sobre cómo proceder en temas clave, en la nación sudamericana que retornó a la democracia en 1990.
