El espacio por excelencia donde un Oficial de la Seguridad del Estado se “realiza” es la pequeña sala donde lleva a cabo sus “conversaciones” con cualquier persona que disiente del sistema político cubano.
Allí, ellos son los jefes. Los que amenazan, insultan y toman decisiones que pueden ser trascendentales para la vida de cualquier ciudadano.
A veces también intentan demostrar su “excelente preparación política”, y terminan enredándose en una sarta de incongruencias que, por el contrario, reflejan su extrema desinformación y carencia de sentido común.
Divorciados de la realidad, por ignorancia o por voluntad, pretenden convencer al “equivocado” de que todo lo que ve, lo que siente y hasta lo que sufre, no son más que malas interpretaciones o malas intenciones de su parte.
Esto ocurre a sabiendas de que todo quedará allí. Sus palabras no serán escuchadas en público y si se equivocan, exageran, mienten o abusan no importa; las cuatro paredes los protegen.
Pero a veces esas palabras se escapan y entonces los reyes quedan expuestos. Es la oportunidad de las víctimas de hacer un poquito de justicia ante tanta infamia.
Hoy SOMOS+ publica una de estas “conversaciones”. Donde la Jefa de Inmigración “Vilma” y el Mayor “Oliver”, comunican a un joven brillante y trabajador, que no puede salir del país porque está “regulado”. O hablando en plata, porque a ellos, o a sus jefes, no les da la gana.
Escuchen con atención toda la grabación y encontrarán muchos detalles interesantes acerca de cómo funcionan y cómo piensan estos señores que se creen dueños no solo del país sino también de sus habitantes.
Disculpen la imperfección del sonido, entenderán que estamos dentro de su territorio, donde los únicos que pueden grabar bien y cómodos son ellos…
Aquí les va la conversación:
Publicado originalmente en Somos +
