El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo el miércoles que se estaba centrando en asegurarse de que Marco Rubio pueda empezar a trabajar a pleno rendimiento en los principales temas de política exterior, incluida Ucrania, cuando lo suceda el próximo mes.
En una amplia entrevista con Reuters que cubrió Ucrania, Corea del Sur y Oriente Medio, así como su legado como secretario de Estado de la nación, Blinken dijo que la administración del presidente Joe Biden estaba manteniendo informado al equipo del presidente electo Donald Trump sobre los principales temas de política exterior.
"Quiero asegurarme de que mi sucesor, el senador Rubio, pueda empezar a trabajar a plena capacidad", dijo Blinken al margen de una reunión de ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN en Bruselas.
"Mi intención y mi enfoque, como dije, es asegurarme de entregarles la mano más fuerte posible para que jueguen. Y creo que eso está en su (interés), en el interés del país y en el interés de la administración", dijo Blinken.
Rubio, de 53 años, es conocido por ser un halcón en contra de China, un crítico abierto del gobierno comunista de Cuba y un firme defensor de Israel.
En el pasado, ha abogado por una política exterior estadounidense más firme con respecto a los enemigos geopolíticos de Estados Unidos, aunque recientemente sus opiniones se han alineado más estrechamente con las del enfoque de Trump de "Estados Unidos primero" en política exterior.
La administración Biden ha acelerado la ayuda militar a Ucrania para fortalecer la posición de Kiev en el campo de batalla con Rusia y reforzarla antes de que Trump asuma el cargo el 20 de enero.
Blinken dijo que las medidas que Washington estaba tomando ahora para reforzar a Kiev antes de posibles negociaciones beneficiaban a la administración Trump, aunque se negó a decir si Trump estaba o no alineado con la posición de la administración Biden en relación con Ucrania.
"Tendrá una mano fuerte para jugar, ya que decidirá, junto con otros, hacia dónde va esto el año que viene", dijo Blinken.
Trump prometió durante su campaña electoral poner fin al conflicto en Ucrania en las 24 horas siguientes a su investidura, si no antes, pero no ha dicho cómo. Había designado al teniente general retirado del ejército Keith Kellogg como su enviado entre Rusia y Ucrania.
La guerra en Gaza
Blinken ha estado a la vanguardia de los esfuerzos de la administración Biden para poner fin a la guerra entre Israel y Hamás en Gaza.
A pesar de múltiples viajes a Israel para reunirse con los líderes israelíes, no ha logrado tender puentes entre el primer ministro Benjamin Netanyahu y los militantes de Hamás. La semana pasada, cuando Biden anunció un alto el fuego en el conflicto paralelo en el Líbano entre Israel y Hezbolá, dijo que Washington haría un último esfuerzo para lograr un alto el fuego también en Gaza.
"Estamos centrados en hacer todo lo que podamos, buscando todas las vías que podamos para finalmente concluir un acuerdo", dijo Blinken, pero se negó a dar más detalles sobre el estado de las negociaciones.
Como secretario de Estado de Biden, Blinken ha estado en la línea de fuego de las críticas de los defensores de los derechos humanos y los grupos propalestinos, algunos de los cuales han acampado fuera de su casa, acusándolo de ser "el carnicero de Gaza".
Cuando se le preguntó cómo la conducta de Israel podría reflejarse en su legado como el principal diplomático estadounidense, Blinken dijo que su legado era para que la gente lo juzgara y que estaba concentrado en lograr un alto el fuego en sus últimos días en el cargo.
"Llegará un momento, quizá mucho tiempo, después del final de esta administración, en el que la gente juzgará lo que hicimos, si hicimos lo correcto, si hicimos lo incorrecto... No tengo tiempo para hacer eso ahora", dijo Blinken.
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