El líder social colombiano Jorge Solano Vega, que había denunciado las amenazas de las guerrillas del Ejército de Liberación Nacional en su zona, fue asesinado a tiros este martes en el municipio de Ocaña, en el departamento de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela.
"Jorge Solano Vega, líder social de Ocaña, Norte de Santander, fue hoy víctima de política de odio e intolerancia en nuestro país. Fue asesinado en su propia vivienda", informó la Defensoría del Pueblo sobre el crimen.
Solano era el delegado de la mesa municipal de víctimas del
conflicto armado en esa región y en 2019 fue retenido, junto con un
equipo de periodistas, por integrantes de la guerrilla del ELN.
Samir Casadiego, alcalde de Ocaña, rechazó el homicidio e instó a las autoridades para que capturen a los responsables
"Rechazamos el atentado en el que se le arrebata la vida al líder social Jorge Solano Vega. Estos actos van en contra de los Derechos Humanos y los anhelos de paz de los ocañeros y los colombianos en general. Exigimos investigaciones urgentes", expresó el alcalde en declaraciones que recoge el diario El Tiempo.
Las fuertes críticas de Solano Vega a funcionarios públicos y su compromiso con causas sociales le causaron varias amenazas de muerte durante su trayectoria como líder social. También, fue retenido en varias ocasiones por grupos armados mientras se desplazaba en la subregión del Catatumbo, indica el diario colombiano.
El director para las América de Human Rights Watch, José Miguel
Vivanco, condenó el crimen del líder social, quien había "denunciado
corrupción y en mayo reportó amenazas del ELN".
"Las autoridades deben esclarecer su homicidio y redoblar
urgentemente las medidas de protección", expresó Vivanco en Twitter.
La delegación del ELN encabezada por Pablo Beltrán, permanece en Cuba tras la interrupción de los diálogos de paz por parte del gobierno del presidente Iván Duque.
Colombia ha insistido en que los cabecillas de esta guerrilla que permanecen en La Habana sean extraditados luego del atentado terrorista contra la Escuela de Policía General Santander, atribuido a ese grupo guerrillero.