El periodista independiente Jorge Bello Domínguez, residente en Güira de Melena, Artemisa, continúa enfrentando pésimas condiciones en el penal Combinado del Este, en La Habana, sin medicamentos y sin asistencia médica especializada, entre otras penurias, denunció su madre, Martha Domínguez, tras visitarlo en prisión.
“Ayer (martes) fue la visita: Eso es lo más grande de la vida, aquello está muy malo. La comida es un sancocho, no hay medicamentos… Todavía a Jorge no le han dado la asistencia médica necesaria por la pérdida de la visión que está sufriendo debido a la diabetes. El nivel de azúcar no se la están midiendo por falta del instrumento, y lo están inyectando con una jeringuilla con una aguja despuntada, que le provoca abscesos en el cuerpo, en los brazos y muslos.
Le llevé varios medicamentos, entre ellos insulina, y no me la dejaron pasar. Entonces le pregunté al reeducador las razones, y le recordé que mi hijo es diabético, y que le puede salir una lesión en la piel, y el funcionario me respondió que allí ellos tienen de todo, algo que es totalmente falso. Allí no hay nada, incluso las chinches se están comiendo en vida a los presos, que tienen que dormir en el piso porque las colchonetas están totalmente infectadas”, aseguró la mujer.
Este viernes, en el Tribunal Municipal de Marianao, en La Habana, se realizará el juicio de apelación del comunicador, así como del resto del grupo de residentes de Güira de Melena, condenados por su participación en las protestas populares del 11J, señala Martha.
“El abogado no nos dice nada; Jorge lo llamó y le dijo que tenía necesidad de comunicarse con él para ponerse de acuerdo para la apelación y no ha sido posible reunirse. Eso me tiene muy preocupada a mí. Jorge se mantiene en su misma línea y no colabora con las autoridades ni participa en ninguna actividad política en el penal, yo no espero nada bueno del régimen”, destacó la madre del comunicador.
Jorge Bello Domínguez ya fue sentenciado a 15 años de prisión por el Tribunal Militar Occidental de Artemisa, por los presuntos delitos de “sabotaje con carácter continuado”, “robo con fuerza”, desórdenes públicos” y “desacato”.