El gobierno cubano implementará medidas más severas para intentar frenar la propagación del coronavirus en el país, donde las cifras oficiales indican que se han confirmado más de 5,000 casos positivos por semana desde finales de enero de este año.
La presencia de focos de COVID-19 se ha incrementado incluso en territorios que mostraban un control de la enfermedad, mientras cubanos en la isla alertan que hay falta de transparencia informativa por parte de las autoridades en medio del rebrote que sufre la isla.
En el poblado de Torriente, en el municipio de Jagüey Grande, provincia de Matanzas, los residentes están aislados desde el lunes 5 de abril, totalmente desabastecidos, y las autoridades han interrumpido el servicio de telefonía celular con el propósito de que las personas no informen sobre lo que está ocurriendo, dijo desde allí a Radio Martí Alexander Águila Sosa, miembro del partido por la democracia Pedro Luis Boitel.
“Estamos militarizados las 24 horas del día. Hay una escuela que está operando como albergue de las Tropas Especiales, los Boinas Rojas y Boinas Negras, Los casos que ya están confirmados, y los niños, sí los dejan en el hospital de Jagüey Grande. En esta misma casa donde estoy realizando esta comunicación, la nieta de la señora la llevaron para el hospital provincial en la ciudad de Matanzas, junto a esposo, mientras que el niño esta ingresado aquí, en Jagüey”, destacó el opositor.
El Partido Demócrata Cristiano de Cuba acaba de hacer un llamamiento a las autoridades cubanas ante el incremento de los casos de coronavirus en el sistema penitenciario de la provincia de Camagüey, principalmente en las cárceles de Kilo 7 y 8, reporta su delegado en el territorio agramontino, Jiordan Marrero Huerta.
“Tiene como objetivo hacerles un llamado a las autoridades de salud pública y del Departamento de Cárceles y Prisiones, para que brinden una información real sobre en qué estado se encuentran sus familiares recluidos”, indicó.
El apóstol Yoel Demetrio, quien preside la Iglesia Misionera de Cuba, en Las Tunas, cuenta que su nieta fue diagnosticada con COVID-19 el lunes, luego de resultar contagiada por su abuela materna, que es enfermera del hospital Ernesto Guevara de la Serna, esta última ya hospitalizada, en estado grave.
La menor está aislada junto a sus padres, y esto no ha sido informado hasta este jueves en el reporte diario del Ministerio de Salud Pública de Cuba (MINSAP), asegura el religioso.
También en el reparto Buenavista, en la Calle 5 y Marta Abreu, hubo un brote y se llevaron a varias personas, y "de eso no se habla", dijo.
“La niña no ha salido entre los casos pediátricos del reporte del Dr. Durán, y es mi nieta, que se llama Meyvi Terry Álvarez. Ellos están en el centro de aislamiento ubicado en la universidad Lenin desde el lunes. Nos llaman todos los días, y nos piden que oremos para que ellos puedan alimentarse, porque dicen que está muy crítica la situación”, comentó el pastor.
El miércoles, la provincia de Sancti Spíritus, reportó 92 casos de coronavirus en total, de ellos 73 en el municipio de Cabaiguán. Allí, en el poblado de Guayos, está ubicada la prisión provincial, señala el periodista independiente Adriano Castañeda.
“No se reflejan en las estadísticas oficiales sobre la situación de los casos de contagio en las prisiones, y esta infestada la prisión Nieves Morejón”, reiteró el comunicador.
En la provincia de Granma, la pandemia se complicó con el brote de la enfermedad en las cárceles, una situación que hasta el día de hoy sigue siendo "un secreto de estado", señaló el activista Emiliano González.
“Los casos se multiplican en las prisiones y en la calle, y no hay manera de detenerlos, pero eso no lo dice el Dr. Durán”, expresó González.
El abogado y periodista Roberto Jesús Quiñones Haces, desde Guantánamo, califica de "vergonzosa" la manipulación y censura informativa del gobierno sobre el COVID-19.
“Este hecho de mantener en silencio lo que está ocurriendo en las cárceles es una falta de transparencia del gobierno cubano”, concluyó el licenciado.
