La organización Solidaridad Cristiana Mundial (CSW) colgó el viernes en su portal de internet el video que encabeza esta información, sobre el asedio por parte de turbas del gobierno cubano a la sede nacional del Movimiento Apostólico, un grupo de iglesias protestantes no reconocidas por las autoridades. La filmación revela una aparente amenaza de incendiar el inmueble con sus ocupantes adentro.
La propiedad, que es también el hogar de uno de los líderes nacionales de la red, se encuentra en la ciudad de Camagüey. Fue legalmente traspasada por su antiguo propietario, el reverendo Omar Gude Pérez, a su sobrino, el reverendo Yiorvis Bravo Denis, antes de que Gude Pérez abandonara el país como refugiado a principios de este año.
A mediados de septiembre, el reverendo Bravo Denis fue citado a comparecer en la corte, donde mostró los documentos, firmados y notarizados por un abogado empleado del gobierno, que acreditan su condición de propietario del inmueble.
Solidaridad Cristiana Mundial señala que desde entonces la familia ha sido víctima de un acoso continuo, incluyendo "actos de repudio" donde turbas violentas y verbalmente abusivas, organizadas por agentes de seguridad del Estado, rodean la propiedad para intimidar a los habitantes.
En una muestra de solidaridad, sin embargo, líderes y miembros de otras iglesias de la ciudad y el país se han unido al reverendo Bravo Denis y su familia dentro de la propiedad. La familia cree que esta demostración física de apoyo los ha protegido hasta ahora.
La nota precisa que las autoridades han desplegado una campaña de difamación contra los reverendos Bravo Denis y Gude Pérez. Agrega que esta semana el Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba en Camagüey, Jorge Luis Tapia Fonseca, se reunió con miembros de los medios de comunicación estatales incluidos periodistas de radio, prensa escrita y televisión, para que publicaran piezas difamatorias en las que debían enfatizar que Yiorvis y Omar no son pastores, sino delincuentes comunes.
Familiares del reverendo Bravo Denis dijeron a CSW que la situación sigue siendo tensa . La casa permanece rodeada por agentes de la Seguridad del Estado día y noche .Un periodista independiente que intentó entrevistar a los miembros de la iglesia recibió amenazas de muerte verbales de los agentes de seguridad del Estado.
"Se han dado cuenta de que a los ojos del mundo , han perdido la batalla legal para confiscar la casa ... Esto ha causado un gran escándalo en Camagüey, donde jamás ha sucedido nada así", dijo Kenia Denis, esposa del reverendo Gude Pérez y tía del reverendo Bravo Denis .
El presidente ejecutivo de CSW, Mervyn Thomas, instó a la comunidad internacional a condenar urgentemente las acciones del gobierno cubano contra esta familia y su iglesia en el último mes.
“Esta campaña de hostigamiento e intimidación, dirigida contra un grupo de personas que no han cometido ningún delito, es inaceptable y revela la verdadera postura del Partido Comunista de Cuba en lo que respecta a la libertad de religión o de creencias”, aseveró el directivo.
“Hacemos un llamado al gobierno cubano a dejar de hostigar al reverendo Bravo Denis y el Movimiento Apostólico, y facilitar un proceso en el que esta red de iglesias pueda operar legalmente.Felicitamos al pueblo de Cuba, y de Camagüey en particular, por su valiente muestra de solidaridad con el reverendo Bravo Denis y su familia durante estos ataques. Estamos con ellos en espíritu", terminó diciendo Thomas.
La propiedad, que es también el hogar de uno de los líderes nacionales de la red, se encuentra en la ciudad de Camagüey. Fue legalmente traspasada por su antiguo propietario, el reverendo Omar Gude Pérez, a su sobrino, el reverendo Yiorvis Bravo Denis, antes de que Gude Pérez abandonara el país como refugiado a principios de este año.
A mediados de septiembre, el reverendo Bravo Denis fue citado a comparecer en la corte, donde mostró los documentos, firmados y notarizados por un abogado empleado del gobierno, que acreditan su condición de propietario del inmueble.
Solidaridad Cristiana Mundial señala que desde entonces la familia ha sido víctima de un acoso continuo, incluyendo "actos de repudio" donde turbas violentas y verbalmente abusivas, organizadas por agentes de seguridad del Estado, rodean la propiedad para intimidar a los habitantes.
En una muestra de solidaridad, sin embargo, líderes y miembros de otras iglesias de la ciudad y el país se han unido al reverendo Bravo Denis y su familia dentro de la propiedad. La familia cree que esta demostración física de apoyo los ha protegido hasta ahora.
La nota precisa que las autoridades han desplegado una campaña de difamación contra los reverendos Bravo Denis y Gude Pérez. Agrega que esta semana el Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba en Camagüey, Jorge Luis Tapia Fonseca, se reunió con miembros de los medios de comunicación estatales incluidos periodistas de radio, prensa escrita y televisión, para que publicaran piezas difamatorias en las que debían enfatizar que Yiorvis y Omar no son pastores, sino delincuentes comunes.
Familiares del reverendo Bravo Denis dijeron a CSW que la situación sigue siendo tensa . La casa permanece rodeada por agentes de la Seguridad del Estado día y noche .Un periodista independiente que intentó entrevistar a los miembros de la iglesia recibió amenazas de muerte verbales de los agentes de seguridad del Estado.
"Se han dado cuenta de que a los ojos del mundo , han perdido la batalla legal para confiscar la casa ... Esto ha causado un gran escándalo en Camagüey, donde jamás ha sucedido nada así", dijo Kenia Denis, esposa del reverendo Gude Pérez y tía del reverendo Bravo Denis .
El presidente ejecutivo de CSW, Mervyn Thomas, instó a la comunidad internacional a condenar urgentemente las acciones del gobierno cubano contra esta familia y su iglesia en el último mes.
“Esta campaña de hostigamiento e intimidación, dirigida contra un grupo de personas que no han cometido ningún delito, es inaceptable y revela la verdadera postura del Partido Comunista de Cuba en lo que respecta a la libertad de religión o de creencias”, aseveró el directivo.
“Hacemos un llamado al gobierno cubano a dejar de hostigar al reverendo Bravo Denis y el Movimiento Apostólico, y facilitar un proceso en el que esta red de iglesias pueda operar legalmente.Felicitamos al pueblo de Cuba, y de Camagüey en particular, por su valiente muestra de solidaridad con el reverendo Bravo Denis y su familia durante estos ataques. Estamos con ellos en espíritu", terminó diciendo Thomas.