El dolor tiene cara de mujer en Dianelis Naranjo. En días recientes visitó a su esposo, detenido en Nassau, y dijo que le dio sentimiento al verle "me dio mucho sentimiento, me dijo que tenía ganas de abrazarme, pero no podía ni tocarle la mano"
Uno de los cubanos arrestados en la isla caribeña es Javier Urbay, de 23 años, natural de Caibarién, quien llego a Nassau el pasado junio en una embarcación con otras doce personas.
Este grupo proveniente de Caibarién, se peló a rape en señal de protesta, pidiendo mejores condiciones carcelarias, el cese de las golpizas y sobretodo, la libertad sin regreso a Cuba.
Dianelis viajó a Nassau con Yaumara de la Rosa, tía de Javier, gracias a loables esfuerzos de amigos de ese poblado en el centro de la Isla, quienes lograron acopiar el dinero para el boleto aéreo.
Juntas visitaron el centro de detención de Nassau y dieron testimonio de sus percances cuando “me registraron, me tocaron mis partes... y no me permitieron entrar el celular para desenmascarar a esta banda de bandidos, descarados".
Afirma que “desde que entramos registrándonos, tocándonos por todas partes y cuando los vi a ellos lo único que hice fue llorar".
Llanto por hombres golpeados y desnutridos, que yo también vi en mi visita al centro de detención. Como reportero también fui objeto del cacheo desmedido. Me ocuparon el pasaporte estadounidense, el teléfono celular y la libreta de notas.
Tras las rejas hay unos 50 cubanos, entre ellos, Lázaro Cantero, Yadriel Rodríguez, y Ezequiel Rodríguez, todos de Caibarién.
Roberto Lauzerique, cubano que vive en Bahamas hace dos años como refugiado reconocido por la ONU. En su momento, pasó más de siete meses detenido en la misma instalación y ha denunciado las penurias que allí se pasan.
Las autoridades de Bahamas han desmentido las denuncias procedentes del centro de detención. El embajador de cuba en Nassau visito el centro y aún no se ha pronunciado sobre las quejas que recibió.
Uno de los cubanos arrestados en la isla caribeña es Javier Urbay, de 23 años, natural de Caibarién, quien llego a Nassau el pasado junio en una embarcación con otras doce personas.
Este grupo proveniente de Caibarién, se peló a rape en señal de protesta, pidiendo mejores condiciones carcelarias, el cese de las golpizas y sobretodo, la libertad sin regreso a Cuba.
Dianelis viajó a Nassau con Yaumara de la Rosa, tía de Javier, gracias a loables esfuerzos de amigos de ese poblado en el centro de la Isla, quienes lograron acopiar el dinero para el boleto aéreo.
Juntas visitaron el centro de detención de Nassau y dieron testimonio de sus percances cuando “me registraron, me tocaron mis partes... y no me permitieron entrar el celular para desenmascarar a esta banda de bandidos, descarados".
Afirma que “desde que entramos registrándonos, tocándonos por todas partes y cuando los vi a ellos lo único que hice fue llorar".
Llanto por hombres golpeados y desnutridos, que yo también vi en mi visita al centro de detención. Como reportero también fui objeto del cacheo desmedido. Me ocuparon el pasaporte estadounidense, el teléfono celular y la libreta de notas.
Tras las rejas hay unos 50 cubanos, entre ellos, Lázaro Cantero, Yadriel Rodríguez, y Ezequiel Rodríguez, todos de Caibarién.
Roberto Lauzerique, cubano que vive en Bahamas hace dos años como refugiado reconocido por la ONU. En su momento, pasó más de siete meses detenido en la misma instalación y ha denunciado las penurias que allí se pasan.
Las autoridades de Bahamas han desmentido las denuncias procedentes del centro de detención. El embajador de cuba en Nassau visito el centro y aún no se ha pronunciado sobre las quejas que recibió.