Madelín Lázara Caraballo Betancourt, activista de derechos humanos detenida el pasado 3 de octubre cuando apoyaba a víctimas de un desalojo en La Habana Vieja rechazó los delitos de desorden público, desacato, atentado, resistencia y daños a la propiedad del Estado, de que ha sido acusada.
La opositora se comunicó vía telefónica con el Centro de Información Hablemos Press y explicó que ella fue maltratada cuando se solidarizó con familias desalojadas en una ciudadela situada en La Habana Vieja, sin embargo ahora la acusan de atentado, entre otros cargos.
“Me agarraron por los pelos, me golpearon y me llevaron a la fuerza para un carro patrullero, todavía siento dolores en un brazo, pero yo no agredí a nadie”, puntualizó la activista del Partido Republicano de Cuba.
Caraballo Betancourt dijo que cuando vio que los niños y las madres serían desalojadas comenzó a gritar Abajo la Dictadura y de inmediato fue detenida por la Seguridad del Estado.
Caraballo Betancourt permanece en el área destinada a los enfermos del SIDA en la prisión de mujeres de San José, provincia Mayabeque, debido a que en el pasado contrajo el VIH a través de una transfusión de sangre que le aplicaron.
Ha sido detenida en múltiples ocasiones debido a su activismo a favor de los derechos humanos y fue una de los trece opositores del Partido Republicano de Cuba (PRC), que ocuparon la Basílica Menor de la Iglesia de Nuestra Señora de la Caridad, en Centro Habana, en víspera de la visita del papa Benedicto XVI.
La opositora se comunicó vía telefónica con el Centro de Información Hablemos Press y explicó que ella fue maltratada cuando se solidarizó con familias desalojadas en una ciudadela situada en La Habana Vieja, sin embargo ahora la acusan de atentado, entre otros cargos.
“Me agarraron por los pelos, me golpearon y me llevaron a la fuerza para un carro patrullero, todavía siento dolores en un brazo, pero yo no agredí a nadie”, puntualizó la activista del Partido Republicano de Cuba.
Caraballo Betancourt dijo que cuando vio que los niños y las madres serían desalojadas comenzó a gritar Abajo la Dictadura y de inmediato fue detenida por la Seguridad del Estado.
Caraballo Betancourt permanece en el área destinada a los enfermos del SIDA en la prisión de mujeres de San José, provincia Mayabeque, debido a que en el pasado contrajo el VIH a través de una transfusión de sangre que le aplicaron.
Ha sido detenida en múltiples ocasiones debido a su activismo a favor de los derechos humanos y fue una de los trece opositores del Partido Republicano de Cuba (PRC), que ocuparon la Basílica Menor de la Iglesia de Nuestra Señora de la Caridad, en Centro Habana, en víspera de la visita del papa Benedicto XVI.
