El activista Armando Peña miembro del Consejo Coordinador del Movimiento Cristiano Liberación (MCL), criticó al gobierno de Cuba por utilizar la presión y la pobreza de la población para para llenar las plazas y vender al exterior la imagen de que tiene apoyo del pueblo.
En un video difundido por el MCL el dirigente opositor residente en Las Tunas se refirió a la marcha por el Día del Trabajo realizada en la Plaza de la Revolución en la que miles de personas desfilaron frente al presidente Raúl Castro y recordó que en Cuba hay una dictadura que dura más de 50 años y tomó el poder por las armas, pues nunca han sido elegidos democráticamente”.
La inmensa mayoría de gente que fue a las plazas el 1 de mayo no lo hizo por propia voluntad propia. "Va por presiones, denunció el líder opositor al recordar que en Cuba los centros de trabajo son controlados por el régimen, el cual también decide a quién le otorga o quita las patentes –licencias-, para colocar cualquier pequeño negocio.
A juicio del opositor todo el mundo va ahí con miedo porque no les quiten el trabajo, no les quiten las patentes.
El líder opositor también denunció el control del régimen comunista sobre los sindicatos, reunidos en la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) y recordó que en el país el sindicato es un instrumento al servicio de quien gobierna.
Entre los ejemplos acerca de las acciones del gobierno para sacar a la población a las plazas y poder vender “una imagen al mundo” de que tiene apoyo del pueblo, precisó que "saca los productos que no se ven en la calle a venderlos allí a un precio (más barato) para que la gente vaya corriendo a la plaza a comprarlo” y lamentó que el sindicato no ha hecho nada, no mueve ni un dedo y no se pronuncian al respecto.
Otra práctica del gobierno es llevar a las plazas los grupos musicales conocidos y vender cervezas para atraer gente. La mayoria no va porque apoye el sistema sino porque quieren comprar algo de comer.
Con relación a las negociaciones que realizan actualmente el régimen con la Unión Europea y que significarían el fin de la Posición Común, que exige el respeto a los derechos humanos en la isla como requisito para cualquier tratado, el opositor pidió al mundo que conozca lo que ocurre en Cuba y que no se dejen engañar por el Gobierno de Raúl Castro.
En un video difundido por el MCL el dirigente opositor residente en Las Tunas se refirió a la marcha por el Día del Trabajo realizada en la Plaza de la Revolución en la que miles de personas desfilaron frente al presidente Raúl Castro y recordó que en Cuba hay una dictadura que dura más de 50 años y tomó el poder por las armas, pues nunca han sido elegidos democráticamente”.
La inmensa mayoría de gente que fue a las plazas el 1 de mayo no lo hizo por propia voluntad propia. "Va por presiones, denunció el líder opositor al recordar que en Cuba los centros de trabajo son controlados por el régimen, el cual también decide a quién le otorga o quita las patentes –licencias-, para colocar cualquier pequeño negocio.
A juicio del opositor todo el mundo va ahí con miedo porque no les quiten el trabajo, no les quiten las patentes.
El líder opositor también denunció el control del régimen comunista sobre los sindicatos, reunidos en la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) y recordó que en el país el sindicato es un instrumento al servicio de quien gobierna.
Entre los ejemplos acerca de las acciones del gobierno para sacar a la población a las plazas y poder vender “una imagen al mundo” de que tiene apoyo del pueblo, precisó que "saca los productos que no se ven en la calle a venderlos allí a un precio (más barato) para que la gente vaya corriendo a la plaza a comprarlo” y lamentó que el sindicato no ha hecho nada, no mueve ni un dedo y no se pronuncian al respecto.
Otra práctica del gobierno es llevar a las plazas los grupos musicales conocidos y vender cervezas para atraer gente. La mayoria no va porque apoye el sistema sino porque quieren comprar algo de comer.
Con relación a las negociaciones que realizan actualmente el régimen con la Unión Europea y que significarían el fin de la Posición Común, que exige el respeto a los derechos humanos en la isla como requisito para cualquier tratado, el opositor pidió al mundo que conozca lo que ocurre en Cuba y que no se dejen engañar por el Gobierno de Raúl Castro.