En días en que Cuba es noticia por enviar un cargamento de armas camuflado entre sacos de azúcar en un buque norcoreano, medios locales de prensa anuncian la revisión de la ley de navegación marítima.
El anteproyecto discutido por parlamentarios cubanos incluye, entre otros temas, la autoridad marítima nacional, la competencia del Ministerio de Transporte en esta área, las señalizaciones, el practicaje, la construcción naval y la transportación de cargas y pasajeros.
"El anteproyecto tiene el propósito de regular el régimen general de la navegación en Cuba, en su mar territorial, la zona contigua y la económica exclusiva, así como las aguas interiores, los ríos, lagunas y embalses. También estipula lo relacionado con los servicios auxiliares y conexos, además de lo relativo a los buques, embarcaciones y artefactos navales dedicados a fines comerciales, científicos, turísticos, deportivos y recreativos, y a los actos y hechos relacionados con el transporte marítimo, fluvial y lacustre", explica una nota divulgada por Prensa Latina.
Durante el encuentro, indica el diario Granma, el presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Esteban Lazo explicó en "el ejercicio de la potestad de esta futura ley se ejecuta por el Gobierno cubano a través de los ministerios de Transporte y del Interior".
A raíz del escándalo por el hallazgo de material bélico procedente de Cuba que no fue declarado ni por las autoridades marítimas de la isla ni las de Corea del Norte, el pasado 16 de julio el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba divulgó una declaración en la que se admitía que el buque norcoreano zarpó de un puerto cubano rumbo a la República Popular Democrática de Corea con un cargamento, mayormente, de 10,000 toneladas de azúcar, 240 toneladas métricas de armamento que incluyen dos complejos coheteriles antiaéreos Volga y Pechora, nueve cohetes en partes y piezas, dos aviones Mig-21 Bis y 15 motores de este tipo de avión.
