Hace 15 años, cuando nació Yeison Olivera Pérez, a su madre se le practicó una cesárea tardía e inmediatamente el niño sufrió una parálisis cerebral infantil, conocida como PCI. La negligencia médica provocó que el hoy adolescente no camine, ni pueda avisar cuando hace sus necesidades fisiológicas y, encima, recibe una pésima atención por parte de las autoridades sanitarias en Cuba.
En el programa Contacto Cuba (a partir del minuto 8:35), de Radio Martí, la hermana de Yeison, Sadys Olivera Pérez, relató las vicisitudes que ha atravesado la familia desde que los médicos tardaron en practicar la cesárea y el niño se defecara dentro del vientre materno, sumando este problema a los que ya tenían.
"Vivíamos 15 personas en un cuartico de 4X4 metros, nos tuvimos que ir de ahí, y meternos en una nave (almacén) que está totalmente inhabitable en el municipio Cerro; las paredes son de cartón, no hay agua", señaló Sadys.
La joven admite que desde un principio no hicieron las reclamaciones debidas, lo cual achaca a la falta de conocimiento, pero su situación se ha agravado con el paso del tiempo.
El tratamiento empezó en una clínica de Rehabilitación en La Habana Vieja, a la que han dejado de asistir por falta de una silla de ruedas para transportar a su hermano. "Necesita un coche (silla de ruedas), su coche está en pésimas condiciones", indica Sadys, a lo que se suma la falta de pañales desechables para sus necesidades fisiológicas.
"Hace poco le dieron unos culeros desechables, que debe usar a diario, pero se los dan esporádicamente y son para un bebé de seis meses de edad, no le sirven", se queja la hermana de Yeison, que ha aceptado hablar para Radio Martí.
Sadys Olivera dice que ella y su madre han acudido a varias instituciones gubernamentales para reclamar una mejor atención, pero siempre han recibido evasivas o consejos de que tengan paciencia y resignación. En una oficina de Seguridad Social del municipio Habana Vieja les dijeron que el municipio Cerro no tenía los pañales que ellos necesitan.
El pastor Alejandro Hernández, del Movimiento Apostólico, quien facilitó el contacto con la familia, dijo que se acercó a ellos porque "es imposible pasar por aquí y no chocar con esa realidad".
Hernández comentó que se presentó en una dependencia oficial a indagar por el caso y la respuesta fue absurda. "Fui a la oficina de Seguridad Social y me dijeron que en Habana Vieja no habían entregado nada por malos manejos (¿?)", y agregó que al adolescente le dan unos 185 pesos cubanos de chequera, los que al cambio actual resultan unos 7.40 CUC.
En su pesquisa, el también periodista independiente Hernández indagó y pudo comprobar que la madre de Yeison no puede trabajar pues debe atenderlo las 24 horas del día, pero tampoco le ofrecen el estipendio destinado por el Gobierno para familiares que se dedican al cuidado permanente de enfermos.
Para contactar con la familia: Calle Aguadulce #57, e/ Rabí y San Indalecio. Municipio Cerro. Teléfono: (53) 52729748.