Antes de visitar Cuba en septiembre próximo, el papa Francisco comienza hoy su visita por países latinoamericanos, "los más desfavorecidos", según comenta la prensa internacional.
Ecuador será el primer país elegido, adonde el Papa llegará esta tarde. Luego de reunirse con el presidente Correa, viajará mañana a Guayaquil, donde celebrará una misa y almorzará con viejos amigos jesuitas del colegio Javier, informa el diario español El País. Mañana lunes y el martes, en Quito, el Papa mantendrá diversos encuentros con el mundo universitario y la sociedad civil.
Desde hace semanas, Ecuador se encuentra inmerso en una ola de protestas contra las políticas del presidente Rafael Correa, quien atraviesa uno de sus peores momentos. El Presidente ha dispuesto un despliegue de 18.000 policías –el 40% del total de los efectivos.
El miércoles partirá para Bolivia. En La Paz realizará una visita de cortesía al presidente Evo Morales y se reunirá después en la Catedral con las autoridades civiles, pero para evitar los efectos de la altura solo permanecerá cuatro horas, trasladándose después a Santa Cruz de la Sierra.
Bergoglio, que suele hablar de la "patria grande latinoamericana", aprovechará su visita a Ecuador, Bolivia y Paraguay para dirigirse a todo el continente en los 22 discursos que tiene previsto pronunciar durante el viaje. Hasta el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, ha admitido que el trayecto tendrá innegables "connotaciones políticas", por cuanto Latinoamérica se ha convertido en un "auténtico laboratorio" donde se está experimentado "nuevos modelos de participación y formas de Gobierno más representativas que dan voz también a las franjas de población que hasta ahora no se escuchaban lo suficiente".
En Cuba, del 19 al 22 de septiembre, el papa Francisco visitará las ciudades de La Habana, Holguín y Santiago. El Papa fue mediador en las conversaciones secretas que La Habana y Washington celebraron para poner fin a medio siglo de ruptura y antagonismo, que desembocó en un proceso para restablecer las relaciones, anunciado el 17 de diciembre por Barack Obama y Raúl Castro.
